Quentin Tarantino, uno de los cineastas más influyentes y reverenciados de nuestro tiempo, ha construido una carrera sobre su amor profundo y evidente por el cine clásico. Dentro de su vasta colección de influencias, hemos podido ver su interés por las películas orientales reflejado en cintas como Kill Bill sin embargo, son los westerns quienes ocupan un lugar especial en su corazón.
Desde joven, Tarantino se sintió atraído por este género que capturó su imaginación con sus paisajes vastos, personajes complejos y enfrentamientos morales. Esta fascinación se ha manifestado en su propia filmografía, con películas como Django Unchained y The Hateful Eightf, donde rinde homenaje al género mientras lo reinterpreta a través de su peculiar punto de vista.
De entre los actores estadounidenses que interpretan roles en cintas de western, John Wayne es el favorito de Tarantino. Durante una proyección privada en el último Festival de Cannes, el director norteamericano mencionó su admiración por el trabajo de Wayne, quien ha aparecido en icónicas películas como Red River, True Grit y The Searchers. Sin embargo, hay una cinta protagonizada por este legendario actor que marcó la vida y le dio rumbo a la carrera de Tarantino.
Rio Bravo no es solo un western más para Tarantino; es una obra que él describe como una de las mejores películas de todos los tiempos. Dirigida por Howard Hawks y protagonizada por John Wayne, Dean Martin y Ricky Nelson, la cinta cuenta la historia de un sheriff que debe mantener a un prisionero en la cárcel mientras enfrenta la amenaza de los aliados del detenido que intentan liberarlo.
Para Tarantino, la grandeza de Rio Bravo reside en su simplicidad y en la manera en que Howard Hawks construye la narrativa a través de personajes sólidos y bien desarrollados. En numerosas entrevistas, el director ha expresado su admiración por la capacidad de Hawks para hacer una historia envolvente y emocionante con recursos limitados, enfocándose en la dinámica entre los personajes y sus interacciones.
De entre todas las cualidades de Rio Bravo, la que más destaca para Tarantino es la creación de un vínculo entre los personajes y el espectador, durante la proyección en Cannes mencionó que: : “Hay películas en las que te relacionas tanto con los personajes que, de hecho, se hacen amigos. Esa es una cualidad realmente rara en una película y, por lo general, este tipo de película es bastante larga porque lleva mucho tiempo superar al personaje y sentir que realmente conoces y te gusta la persona detrás de él. Rio Bravo es una de las mejores películas de aventuras de todos los tiempos. Cuando termine, serán tus amigos. Lo bueno de verlo una y otra vez es que, para empezar, ya son tus amigos. Cada vez que lo ves, sales con ellos”.
Además, Quentin Tarantino agregó que Rio Bravo es una película que ve regularmente, especialmente en momentos clave de su carrera, como cuando está iniciando un nuevo proyecto. Esta práctica no es solo una cuestión de disfrute personal, sino también una forma de recordar y aprender de la maestría narrativa de Hawks. Tarantino valora cómo la película maneja el ritmo, el desarrollo de los personajes y la construcción de tensión, elementos que él mismo ha incorporado en su propio trabajo.
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