Todos los amantes de las historias de romance antiguo al estilo de Emma., Orgullo y prejuicio y Sensatez y sentimientos, tal vez también seas fiel seguidor de Bridgerton, la famosa serie de Netflix que lleva cuatro años siendo uno de los títulos más populares de la plataforma. Si te fascinan las producciones con vestidos ampones, carruajes y pelucas, las novelas de Julia Quinn deben ser la mejor fuente de tu chismecito gracias a Lady Whistledown.
Desde la primera temporada sabemos que Penelope (Nicola Coughlan) es la persona escondida detrás de la chismosa mujer que publica su semanario religiosamente, pero la sorpresa de Netflix fue que su historia se adelantó a la tercera temporada, en vez de seguir el orden de las novelas y mostrar la travesía de Benedict (Luke Thompson) en el amor.
La tercera temporada de Bridgerton nos mostró la reconciliación entre Penelope y Colin (Luke Newton), de quien siempre estuvo enamorada y que además es el hermano de su mejor amiga; poco a poco comienza a progresar la relación entre ambos y llegan hasta el altar para unirse en matrimonio. Después de unos cuantos roces al enterarse de que su prometida es la persona escondida detrás de revelar los chismes de su familia y la sociedad de Mayfair, ambos se convierten en marido y mujer.
Si vas al corriente con la serie entonces sabes que es conocida por sus peculiares selecciones musicales. Canciones como “Sign of the Times” de Harry Styles y “Give Me Everything” de Pitbull fueron interpretadas con violines para cumplir con la temporalidad de la producción, pero ¿notaste cuál fue la melodía que musicalizó la boda de Penelope y Colin? “Yellow”, de Coldplay, comenzó a sonar y el significado detrás de la elección es tan obvio que seguro ni se te ocurrió.
Netflix
Durante una entrevista con Glamour, la showrunner reveló que el clásico de la banda británica se eligió porque la traducción al español del título representa los colores que identifican a la familia del personaje: “Llegan al altar con “Yellow” de Coldplay, que es un guiño a los amarillos de Featherington y a sus colores”, comentó Jess Brownell. ¿Lo habrías imaginado?
