Sabemos que te ha pasado que al dar vueltas en el catálogo de Netflix sin decidirte por algo nuevo que ver terminas viendo de nuevo alguna de tus favoritas, entre ellas Shrek. Con su trama original, la parodia a los cuentos de hadas, la música y el doblaje de Eugenio Derbez en la voz de Burro, la película es de las mejores opciones para ver cuando sea y ahora que vuelvas a ponerle play te recomendamos poner atención en el minuto 37.
Llegando a este momento de la película, Shrek (Mike Myers) y Fiona (Cameron Diaz) ya están caminando a través de los pasillos devastados del castillo, en busca de su libertad. En su prisa por "rescatar" a la princesa, llevarla con Lord Farquaad y despejar su pantano de todas la criaturas de cuentos de hadas, el ogro toma de la mano a Fiona para apurarla.
Es ahí cuando ella se detiene en seco y le exige a Shrek explicaciones sobre su identidad, quiere conocer el nombre y rostro del hombre para ofrecerle un pañuelo como muestra de su gratitud, aunque no está convencida de los métodos poco ortodoxos de rescate de este príncipe azul. Mientras esto ocurre podemos ver junto a ellos dos detalles que llaman la atención: un gran caldero con algo hirviendo y un enorme libro de recetas.
En primera instancia parece un detalle sin mucha relevancia pero lo tétrico de la escena nos golpea al notar que el título de la receta es "Dulces de caballero" y la ilustración junto al texto tiene el modo correcto para diseccionar el cuerpo de algún desafortunado caballero: brazos, piernas, torso, cabeza y demás. Hay que recordar que Fiona ha vivido muchos años encerrada en la torre más alta del castillo cuidada por la Dragona, pero algo debía comer en todo este tiempo ¿no?
Si bien se podría argumentar que son recetas de su guardiana, la Dragona (que en ese momento estaba muy ocupada ligando con Burro), no había manera en que Fiona consiguiera comida del exterior del castillo por lo que tendría que comer lo que hay disponible para sobrevivir... "Dulces de caballero". Pensar que nuestra querida princesa que de día es una y de noche otra siempre estuvo comiendo carne humana es bastante turbio pero tampoco tan descabellado pensando que no le es complicado ajustar su dieta junto a Shrek comiendo rata asada y demás.
Con esto seguro te quedan ganas de volver a ver todas las películas de Shrek y no es mala idea para esos días en que parece que Ennui de Intensa-Mente 2 es la que controla la consola de tus emociones. Puedes encontrar todas las películas de este par de ogros que viven felices por siempre a través del catálogo de Netflix y tal vez en el camino descubras más referencias como esta.