Hilary Swank y Alan Ritchson protagonizan el nuevo drama basado en hechos reales, Ángeles inesperados. La película llega este jueves 30 de mayo a las salas de Cinépolis y Cinemex y podrás disfrutarla en distintos recintos del país incluyendo Cinemex Forum, Cinemex Macroplaza, Cinépolis Plaza Crystal y Cinépolis Grand Plaza.

‘Ángeles inesperados’: Un drama real que muestra el poder de la comunidad y la fe
Basada en una historia real asombrosa, el filme dirigido por Jon Gunn se centra en Sharon (Hilary Swank), una peluquera tenaz pero en apuros en un pequeño pueblo de Kentucky, que encuentra un nuevo propósito cuando conoce a Ed (Alan Ritchson), un viudo que lucha por llegar a fin de mes con sus dos hijas, esperando un trasplante de hígado para una de ellas. Sharon decide ayudar a la familia y no se detendrá ante nada para conseguirlo.
En una reciente entrevista con Collider, Swank y Ritchson hablaron sobre su experiencia en el set, las escenas más desafiantes de filmar y lo que esperan que el público se lleve después de ver la película. En un primer momento, el actor, conocido por protagonizar la serie Reacher, señaló que la participación de Hilary Swank en este largometraje basado en la fe eleva esta historia inspiradora escrita por Meg Tilly y Kelly Fremon Craig (conocida por ¿Estás ahí, Dios? Soy yo, Margaret).

Hubo una escena en particular que puso nerviosos a Hilary Swank y Alan Ritchson: la escena de patinaje sobre ruedas. Ritchson, recordando la experiencia, comentó: “Había mucha conversación sobre patinaje sobre ruedas, y yo decía, 'Sí, patinaba cuando era niño', pero patinar sobre ruedas es algo que no he hecho en décadas. Así que fue un verdadero tiro al aire ese día, tratando de moverme rápido”. La falta de práctica de Ritchson lo hizo sentir vulnerable, pero la escena finalmente funcionó bien debido a su autenticidad.
Por su parte, Hilary Swank también tuvo sus propios desafíos con la escena de patinaje. Aunque se suponía que su personaje era una buena patinadora, la realidad fue diferente, y esto requirió mucha edición en la postproducción. Swank recordó entre risas: “Se suponía que yo debía ser una buena patinadora sobre ruedas, aunque necesitaron mucha edición”. Esta honestidad y camaradería entre el elenco muestra cómo a veces los momentos más complicados en el set pueden resultar en actuaciones verosímiles y auténticas.

A pesar de los nervios iniciales y las dificultades técnicas, tanto Swank como Ritchson lograron superar el reto. La colaboración entre, como mencionó Ritchson, fue crucial: “Ella se sumergió y elevó la película tanto. Fue un poco aterrador entrar en una película de Hilary, y ella fue tan amable”. La ganadora del Oscar por Boys Don’t Cry y Million Dollar Baby también elogió a su compañero por su capacidad de adaptarse a diferentes géneros, lo cual no es fácil de lograr.
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