Desde Death Note de Adam Wingard hasta Ghost in the Shell con Scarlett Johansson, pasando por Alita: Battle Angel de Robert Rodriguez, el cine ha hecho grandes esfuerzos por rendir homenaje a la rica tradición del manga japonés. Estas películas no solo buscan recrear las historias originales que cautivaron a millones de lectores, sino que también exploran las aventuras y los dilemas de sus personajes en un soporte distinto.
Cada adaptación se enfrenta al desafío de mantener la esencia del manga mientras se aprovechan las capacidades visuales y narrativas del cine. Y una de las películas recientes que logra materializar la esencia del original es Golden Kamuy. El filme, basado en el manga de Satoru Noda, recupera la cosmovisión de los ainu, un pueblo de la fría isla de Hokkaido en Japón, que considera que Dios vive en todo. Kamuy, como llaman a estos espíritus, residen en animales, fenómenos naturales e incluso inventos humanos.
Del manga a la pantalla: ‘Golden Kamuy’ resplandece en Netflix con su épica aventura
La película, que ya puedes disfrutar en Netflix, es sin lugar a dudas una obra de época cuya premisa se basa en la búsqueda de un tesoro que nadie ha visto jamás, y mucho menos tocado. Pero, como las locuras y los vicios de la naturaleza humana permanecen inmutables incluso siglos después, el público de hoy puede sentirse arraigado en la mítica premisa de esta obra.
Si bien muchas películas eligen una época pasada solo por su estética, Golden Kamuy se tomó en serio el significado histórico y cultural de su período. La película utiliza una de las batallas más crueles de la guerra ruso-japonesa para presentar a su héroe, el inmortal Sugimoto (Kento Yamazaki), antes de dirigirse a los bosques nevados de Hokkaido, en donde descubre un alijo secreto de oro.
Desde pelear con osos devoradores de hombres (o Wen Kamuy, como lo llaman los ainu) hasta caer en la trampa de una unidad del ejército rebelde, la película transita del bosque al asentamiento humano en Otaru, reuniendo a todos en un solo lugar. Con numerosos personajes y narrativas interconectadas, hay mucha emoción y entretenimiento para compartir.
La discusión central en Golden Kamuy radica en los crímenes perpetrados por el oro, no en el oro en sí. El filme tiene lugar en una época en la que Japón empezó a mostrar su poder militar contra el mundo, pero a costa de innumerables vidas inocentes. En esta coyuntura volátil, los personajes hacen su jugada política por el poder. Unos se alían con la rápida modernización y militarización del ejército japonés, mientras que otros presionan para resucitar la vieja guardia y las tradiciones.
La guerra les costó mucho a ambos lados, y el peso de sus acciones y su supervivencia aún perdura en ellos. Ambos creen erróneamente que un alijo de oro puede arreglar la injusticia que enfrentaron y expiar la sangre que derramaron. Es difícil diferenciar sus motivaciones de su codicia por el anhelado oro, y esto le da a Golden Kamuy un fuerte conflicto moral.