Estrenada en 1982, esta producción norteamericana es considerada un absoluto clásico de culto, y una de las películas de terror y ciencia ficción más importantes de todos los tiempos. John Carpenter, responsable de obras como Halloween, La niebla y Christine, fue quien estuvo en la silla de director de este proyecto. Con un guion de Bill Lancaster, este filme se sigue manteniendo vigente hasta la actualidad.
La Cosa es una fascinante pieza de horror, la cual, sigue dando pesadillas al público, después de tantas décadas. Sobre todo con su enigmática secuencia final, que da pie a uno de los más grandes misterios del cine.
Casi al finalizar el largometraje, una vez que el resto de los integrantes del equipo han sido fulminados por la criatura cambiante, y la estación de investigación está en llamas, Childs (Keith David) y MacReady (Kurt Russell) se miran fijamente entre sí, mientras comparten una botella de whisky y ríen de forma nerviosa, sin llegar a hacer más.
De esta manera, la película llega a su fin, dejando sembrada una gran incertidumbre. ¿Por qué? Pues existe una gran probabilidad de que La Cosa aún se encuentre dentro del cuerpo de uno de estos personajes. ¿En cuál? Nadie lo sabe, y eso es lo que vuelve tan intrigante a su desenlace. Al final, nosotros, como público, terminamos experimentando la misma ansiedad y paranoia que sintieron los personajes, a lo largo del filme.
De acuerdo con múltiples teorías en internet, Childs es quien alberga a La Cosa en esa secuencia final. ¿Por qué? Pues porque él, a diferencia de MacReady, no exhala vapor por la boca, a pesar de estar a la intemperie, en medio de la Antártida, pista que podría indicar que ya no es del todo humano.
Mientras que John Carpenter nunca ha querido dar una respuesta definitiva sobre el misterioso final, los fans podrán seguir sacando teorías al respecto, y quedarse con las suposiciones que más sientan adecuadas.