Con sus "kamehameha", las inolvidables transformaciones de los Super Saiyajin y villanos tan únicos como Freezer y Majin Buu, Dragon Ball se convirtió en todo un ícono de la cultura popular. Si bien el manga debutó hace 40 años, a la fecha, la máxima creación de Akira Toriyama sigue siendo un hito en el mundo del anime, cuyas aventura continúan vigente con Dragon Ball Daima, una nueva etapa de los Saiyajin que llegará a finales de 2024.
Como muchos de sus fanáticos lo saben (o se lo imaginan), Dragon Ball no llegó de la noche a la mañana, y así como le ocurrió a otros ilustradores, el proceso de creación del anime tuvo muchos intentos fallidos antes de convertirse en un ícono de la cultura popular. Para dar vida a los guerreros Saiyajin en Dragon Ball, Akira Toriyama escribió e ilustró otro manga que sirvió de base para la legendaria historia en la que eventualmente estarían Goku y Bulma.
Desde antes de Dragon Ball, Toriyama tenía claro que los protagonistas de su historia serían un pequeño niño y una adolescente que iniciarían un viaje lleno de aventuras. Sin embargo, tanto Goku como Bulma tenían aspectos y personalidades muy diferentes a Dragon Ball, que distaban demasiado del gran intelecto de la chica y del espíritu de lucha de Kakarotto.
Antes de Dragon Ball, Akira Toriyama trabajó en "Las aventuras de Tongpoo", un manga que seguía a personajes muy parecidos a los héroes clásicos de Dragon Ball como Goku y Bulma. Si bien estos prototipos se asemejaban a Goku y Bulma en casi todos los aspectos, "Las aventuras de Tongpoo" presentó una relación completamente diferente entre Goku y Bulma.
"Las aventuras de Tongpoo" presentó al Tongpoo, un niño de otro mundo que se estrelló en un planeta extranjero. Al inicio de la historia, el personaje parecido a Bulma, que era llamado Plamo, conoce a Tongpoo y se hacen amigos. Sin embargo, a diferencia de la primera interacción de Bulma y Goku, el encuentro inicial de Tongpoo y Plamo dejó en claro que el niño era el más inteligente de los dos, y Plamo era una chica no muy brillante.
Por otro lado, Tongpoo, era un cyborg de otro mundo, lo que significa que tenía acceso a tecnología avanzada, algo así como Corporación Cápsula. Tongpoo usaría estas cápsulas frente a Plamo, quien actuaría completamente asombrada y estupefacta al ser testigo de tecnología que no entendía en lo más mínimo. Plamo no solo era poco inteligente, sino que Tongpoo era una especie de genio, que es exactamente lo opuesto a la relación que los fanáticos verían con Goku y Bulma en Dragon Ball.