Desde Julian Schnabel (La escafandra y la mariposa y Van Gogh en la puerta de la eternidad) hasta Steve McQueen (Shame y 12 años esclavo), numerosos artistas que forjaron sus carreras en las artes plásticas han incursionado con notable éxito en el mundo del cine. En este vasto panorama artístico, sobresale la figura de Sam Taylor-Johnson, una cineasta que emergió del ámbito de la fotografía y el videoarte.
Aunque severamente criticada por su trabajo en Cincuenta sombras de Grey, la directora británica ha manifestado un interés particular en las biopics sobre celebridades de la música. Su más reciente película, Back to Black, que ya puedes disfrutar en las salas de Cinépolis y Cinemex, es una conmovedora biopic sobre la vida y carrera de Amy Winehouse.
Pero antes de explorar el talento de la cantante y compositora londinense, Taylor-Wood confeccionó Nowhere Boy, su ópera prima que gira en torno a una de las figuras más mitificadas en la historia de la cultura pop: John Lennon. La película, que forma parte del catálogo de Amazon Prime Video, es un recuento de los últimos años de adolescencia de Lennon en Liverpool, justo antes de la formación de los Beatles.
Los años juveniles de Lennon: Un viaje nostálgico en ‘Nowhere Boy’
La biopic nos transporta a mediados de la década de 1950, en Liverpool, donde John Lennon (Aaron Taylor-Johnson) vive con su tía, Mimi (Kristin Scott Thomas), y sueña con tener una banda de rock. Lennon también sueña con pasar más tiempo con su madre separada, Julia (Anne-Marie Duff), quien sólo ocasionalmente recuerda que está vivo.
Después de que su madre le enseña a tocar el banjo y luego le compra una guitarra, Lennon forma una banda, The Quarrymen. Poco después, un amigo le presenta a Paul McCartney (Thomas Sangster). Los dos se caen muy bien, aunque a Lennon le gusta la cerveza mientras que McCartney prefiere el té. Los chicos comienzan a ensayar y finalmente, junto con George Harrison, Stuart Sutcliffe y Pete Best, se convierten en la célebre banda que todos conocen.
Basada en las memorias de Julia Baird, la hermana de Lennon, y con un guión de Matt Greenhalgh, Nowhere Boy es una película sin pretensiones y genuinamente entretenida que debería atraer tanto a los fans incondicionales de los Beatles como a los espectadores ocasionales.