Disney respondió a la demanda de Gina Carano con un argumento basado en su derecho constitucional a no asociar su expresión artística con el discurso de la actriz. Carano, conocida por su papel en The Mandalorian, demandó a Disney y Lucasfilm a principios de febrero, alegando que su despido era injustificado y que se trataba de una discriminación por expresar sus opiniones políticas.
Por su parte, la compañía pidió desestimar la demanda argumentando que tenía derecho a proteger su discurso creativo en la serie Star Wars de asociarse con opiniones que consideraba ofensivas y contrarias a sus valores. En su escrito, Disney también se defendió de la acusación de discriminación, señalando que la Primera Enmienda protege su decisión de disociarse de ciertos discursos, incluso si otros consideran esas decisiones "internamente inconsistentes".
El despido de Carano en febrero de 2021 se produjo después de una serie de publicaciones polémicas en redes sociales, incluyendo comparaciones controvertidas y comentarios que generaron indignación. A pesar de la demanda de la actriz y sus exigencias, Disney afirmó que ha tenido suficiente y retiró su derecho a tomar decisiones sobre asociación de discurso en sus producciones.
Disney tenía derecho a proteger su discurso creativo en la serie 'Star Wars' de la asociación con opiniones que Disney y muchos espectadores (y espectadores potenciales) consideraron ofensivas y contrarias a los valores de la empresa...
La batalla legal entre Gina Carano y Disney continúa abierta, mientras que a nivel creativo la ausencia de la actriz en The Mandalorian ya ha sido solucionada y la producción seguirá su curso sin problemas.