Jorge Cuchí, el director galardonado en el Festival de Cine en Morelia por su ópera prima, llega a cines con su segundo largometraje. Un actor malo pone sobre la mesa los temas de consentimiento, el abuso sexual y la impunidad que sucede detrás de lo que vemos en pantalla con la industria del cine y la historia ya está disponible en todos los cines de México.
Con su narración, así como las actuaciones de Fiona Palomo y Alfonso Dosal, el cineasta presenta la tensión de estos casos y las emociones como el miedo, la ira, desesperación e incertidumbre que envuelven a las personas que sufren de este tipo de abusos.
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¿De qué trata 'Un actor malo'?
La trama nos lleva junto a los actores Sandra Navarro (Palomo) y Daniel Zavala (Dosal) quienes comienzan a grabar una película juntos. Ambos mantienen una buena relación y hasta se consideran amigos. Todo cambia durante la filmación de una escena íntima cuando Daniel decide hacer un cambio sin hacer consciente de ello a su compañera.
Sandra acusa a su compañero de haber abusado de ella durante la grabación. La producción debe detenerse y aunque la actriz ha levantado la voz, el actor se declara inocente. Por su parte, los productores intentan solucionar el conflicto de forma interna, pero Sandra pretende denunciar a Daniel ante las autoridades.
La historia real detrás de la premisa
La historia protagonizada por la actriz de El Roomie está inspirada en el caso real de abuso que vivió Maria Schneider en la cinta de El último tango en París cuando Marlon Brando untó mantequilla sobre las partes íntimas de la actriz sin su consentimiento ni previo aviso. "Me encontré con una entrevista que la actriz dio para el Daily Mail. Ahí contó que en la famosa escena de la mantequilla que hizo con Marlon Brando se había sentido violada", dijo el director de Un actor malo para CinePremiere.
De acuerdo con lo que recuerda Cuchí, esta declaración por parte de la actriz de El reportero se dio 40 años después de haber filmado aquella escena. Resulta que el director de El último tango en París, Bernardo Bertolucci, reconoció en otra entrevista que el acto de la mantequilla en cuestión no era parte del guion, sino que se puso de acuerdo con Brando para hacer la escena sin comentarle nada a Schneider. Supuestamente la idea era obtener una reacción genuina de humillación por parte de la actriz.
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"De ahí surgió la idea para Un actor malo, pero la diferencia es que en esta historia la actriz sí va a alzar la voz y va a acusar al actor", dijo el cineasta. La película es el reflejo de una realidad cruda que se vive en el país, no sólo dentro de la industria del cine, sino en muchos entornos de México.
Junto a los actores de Control Z y Huesera, la nueva propuesta de Jorge Cuchí hace un intento por señalar las fallas e injusticias en el sistema penal, así como la parte de la sociedad que tiende a revictimizar a las personas cuando la empatía sale de la conversación. Un actor malo se estrena en cines este 4 de abril y es una excelente propuesta de cine mexicano para apoyar y reflexionar en este fin de semana.
