Existe una película considerada una obra que ha desafiado al tiempo y ha pasado por varias transformaciones desde su concepción hasta convertirse en una película de culto. Inicialmente, su versión original tenía una duración increíble de 20 horas, lo que la convirtió en un proyecto monumental que desafió las convenciones cinematográficas de la época.
El director alemán Wim Wenders se embarcó en esta ambiciosa epopeya en 1991, con un elenco de estrellas internacionales como William Hurt, Sam Neill y Max von Sydow. La trama gira en torno a Claire Tourneur, interpretada por Solveig Dommartin, quien conoce a un misterioso hombre llamado Sam Farber, interpretado por William Hurt. Juntos, emprenden un viaje alrededor del mundo para utilizar una cámara especial que registra las etapas de la vida de la madre ciega de Claire, con la esperanza de proyectar las imágenes en su cerebro en un laboratorio secreto.
Sin embargo, la película enfrentó dificultades en su camino hacia la pantalla grande. Wenders tuvo que aceptar recortar la película a aproximadamente 158 minutos para la audiencia estadounidense y 179 minutos para la europea, lo que resultó en una taquilla decepcionante. A pesar de las críticas fascinadas por su enfoque "gigantesco de viajes, aventuras, ciencia ficción, música y amor", la película no logró captar la atención del público en su lanzamiento original.
Sin embargo, Wenders no se rindió. Decidió crear su propia versión de la película a partir de los negativos originales, que finalmente duró unas impresionantes 287 minutos, casi cinco horas. Esta versión, aunque inicialmente no fue ampliamente distribuida, se convirtió con el tiempo en una película de culto dentro de su nicho y ganó una gran reputación entre los cinéfilos.
Actualmente, Hasta el fin del mundo sigue siendo una obra única en la filmografía de Wim Wenders, que ha resistido la prueba del tiempo y ha pasado a ser reconocida como una obra maestra de la ciencia ficción y el cine de autor. Su evolución desde una idea ambiciosa hasta una película de culto es un testimonio del poder del cine para trascender las barreras del tiempo y el espacio.