La importancia de la familia Weasley en la historia de J.K. Rowling se establece desde Harry Potter y la piedra filosofal. Luego de que el personaje de Daniel Radcliffe llega por primera vez a Hogwarts, un joven Draco lo cuestiona sobre su amistad con Ron, diciéndole que el clan de Rupert Grint no es igual al de los Malfoy. Ante el desdén de Draco Malfoy, Harry no se contiene al decirle que él sabe muy bien en qué clase de personas fijarse.
Ron no es el único personaje importante de la familia Weasley. Todos ellos juegan un papel muy importante tanto en la historia del famoso mago como en la lucha para vencer a Lord Voldemort. Por ejemplo, Ginny Weasley, la más joven del clan, eventualmente se convierte en pareja de Harry Potter, uniéndose de forma oficial a la tribu que vive en La Madriguera.
Como muchos otros, los Weasley sufren pérdidas importantes a manos del Señor Tenebroso y sus secuaces. Durante la Batalla de la Torre de Astronomía, Bill resultó gravemente herido y marcado por el hombre lobo Fenrir Greyback, desarrollando algunas tendencias lobunas. Sin embargo, el momento más desgarrador de todos fue la muerte de Fred Weasley, uno de los traviesos gemelos. La trágica partida de Fred Weasley es sin lugar a dudas una de las partes más devastadoras de la franquicia de Harry Potter.
Como matriarca de la familia, Molly Weasley es quien siente más dolor. Aunque generalmente tiende a pasar a un segundo plano en los principales conflictos de los libros y las películas, Molly tuvo oportunidad de vengar la muerte de su hijo enfrentándose a uno de los seguidores más leales de Voldemort, quien le ha causado un gran dolor: Bellatrix Lestrange. Con tanta rabia y dolor, Molly le arrebata la vida a Bellatrix, aunque sin usar un Avada Kedavra.
¿Cómo fue que Molly Weasley mató al personaje de Helena Bonham Carter sin usar la maldición asesina?
Molly lanza una poderosa maldición sin nombre a Lestrange y logra golpearla directamente en el corazón, matándola instantáneamente. En el libro, el duelo es presenciado por Voldemort, quien deja escapar un grito mortal ante la pérdida de su más leal seguidora. El hecho provoca el enfrentamiento final entre Harry y el Señor Oscuro, poniendo fin a la Segunda Guerra Mágica.
También es importante recordar el poder del amor como fuerza mágica en Harry Potter, particularmente de una madre a su hijo. Aunque la protección otorgada a Harry Potter por su madre Lily es el ejemplo más obvio, el amor de Molly Weasley por sus hijos es claro para que todos lo vean. Cuando esta fuerza se combina con otras emociones fuertes como el dolor y la ira, Molly se convirtió en una rival digna para Bellatrix y otros mortífagos.