Las películas de Disney se quedan registradas en nuestros memorias y corazón, porque lo que nos ofrecen en su ficción son historias y personajes que en la vida real serían prácticamente insostenibles dadas sus extremas cualidades bondadosas, románticas, ideales e indescifrables, conmovedoras y a su vez, magistrales.
Por ello cuando llegan secuelas, trilogías y sagas sumamente exitosas, la compañía no duda en brindarles toda su atención para convertirlas en franquicias semiautónomas que puedan asegurarle un largo futuro de ganancias multimillonarias a la marca.
Por tal motivo es que existe una película dentro del catálogo de Disney que le valió a esta empresa el echar la casa por la ventana para llevar a cabo su producción y el lanzamiento de un nuevo personaje.
Con una inversión de 410 millones de dólares, Disney le dio a la saga del Capitán Jack Sparrow (Johnny Depp) el visto bueno para convertirse en la mejor producción de su historia, recaudando 1.46 miles de millones de dólares tras su estreno en mayo de 2011.
Por si fuera poco, esta película le valdría al personaje de Depp la emancipación completa de la trilogía original, ya que aquí el Capitán Jack Sparrow seguiría compartiéndonos sus aventuras, pero sin la compañía de Orlando Bloom ni Keira Knightley como venía ocurriendo desde 2003.
En su trama tenemos una comedia romántica plagada de acción y aventuras en las que Jack Sparrow (Johnny Depp) se reencuentra con un viejo amor que lo obliga a unirse a la tripulación de Barba Negra para emprender un viaje en busca de la legendaria Fuente de la Juventud.
La cinta disponible en Disney + cuenta con la participación de actores como Penélope Cruz, Ian McShane, Sam Claflin y Àstrid Bergès-Frisbey, protagonizando a personajes como Barba Negra, un misionero rebelde y una encantadora sirena que se unirán a los planes del Capitán... ¡Corre a verla!.