Steven Spielberg es uno de los directores en la historia del cine y sus películas con frecuencia son recordadas con mucho cariño, como ocurrió con E.T. el extraterrestre y Los Fabelman, pero también causaron terror como fue el caso de Tiburón y La guerra de los mundos. Entre las decenas de proyectos en las que se ha involucrado el realizador también encontramos el el cine bélico, que ha sido igual de reconocido dentro de su filmografía.
El legendario director ha estado detrás de producciones como la aclamada serie de HBO Band of Brothers, pero ese título no habría sido posible sin la realización de Salvando al soldado Ryan. La película estrenada en 1998 es considerada una de las mejores películas bélicas de la historia y fue protagonizada por Tom Hanks, Matt Damon y Edward Burns, pero a pesar de que ahora continúa siendo recordada como un clásico del cine, durante su lanzamiento provocó ataques de pánico a los espectadores.
Tom Sizemore y Vin Diesel también participaron en este largometraje que lamentablemente impactó a algunos miembros de la audiencia de manera negativa. El realismo en la ejecución de sus escenas de guerra fue devastador para aquellos que combatieron durante la Segunda Guerra Mundial y sus reacciones al ver la película eran tan graves que el Departamento de asuntos de los Veteranos en Estados Unidos creó una línea telefónica para ayudar a los afectados.
Fue especialmente la escena del Desembarco de Normandía en la playa Omaha, mejor conocido como el Día D. El veterano John Raaen compartió a la revista TIME que todos en la sala estaban impresionados viendo la película. “Todo el mundo estaba atónito. Yo también. No iba a hablar con nadie. Me trajo tantos recuerdos que mi mente estaba repasando todas las cosas que sucedieron”, declaró. Sin embargo, no fue el único, pues la línea tuvo más de 170 llamadas para pedir apoyo durante dos semanas después de su estreno.
La terapeuta del Centro de Veteranos de Portland, Deborah Richter, compartió que el impacto que alcanzó Salvando al soldado Ryan sobre los espectadores se debe a que era una producción muy gráfica en comparación con otras. “Es una perspectiva del dolor, del sufrimiento y de las muertes muy diferente. Es el desencadenante definitivo de las experiencias postraumáticas”, comentó a Associated Press.