Uno de los musicales más icónicos de la historia de este género y del cine cumplió dos décadas en el año pasado, manteniéndose además como una de las películas más apreciadas en su género. Dirigida por Rob Marshall, esta adaptación del famoso musical de Broadway revitalizó el interés por este tipo de producciones que cada vez cobran más y más gusto entre las audiencias.
Al inicio de los 2000a, películas como Moulin Rouge y Chicago mismo ayudaron a renovar el interés en los musicales, un género que había perdido popularidad en las décadas anteriores, a excepción de los éxitos de Disney. En el caso particular de Chicago, tenemos que este se destacó no solo por su éxito en taquilla, recaudando más de 306 millones de dólares con un presupuesto de 45 millones, sino también por su acogida crítica excepcional, con un 87% de puntuación en Rotten Tomatoes.
La trama de Chicago nos transporta a la década de 1920, presentando la historia de Roxie Hart, interpretada por Renée Zellweger, una joven que sueña con triunfar en el mundo del espectáculo y que, tras ser arrestada por el asesinato de su amante, se encuentra en prisión junto a Velma Kelly, una famosa cantante de jazz encarnada por Catherine Zeta-Jones.
El filme, que también cuenta con la actuación de Richard Gere como el abogado Billy Flynn, recibió 12 nominaciones a los premios Oscar y ganó 6, incluyendo el premio a Mejor Película. Además, Catherine Zeta-Jones se llevó el premio a Mejor Actriz de Reparto por su interpretación en la película.
Chicago marcó un hito en la revitalización de los musicales en el cine y abrió las puertas a una serie de películas exitosas en las primeras décadas de los 2000. Actualmente, se puede disfrutar de este clásico moderno en el catálogo de la plataforma de streaming Netflix.