El cine de ciencia ficción ha dado a los espectadores todo tipo de producciones, desde obras de Georges Méliès, Stanley Kubrick y James Cameron, el género ha brindado películas que se volvieron hito dentro de la historia, pero fue a finales de los años 90 cuando llegó un largometraje que hasta la fecha continúa siendo considerado como una de las mejores hazañas de todo los tiempos. Dirigida por dos mujeres, esta producción tiene una gran base de fans y sobre todo inmortalizó a su elenco gracias a sus peculiares roles.
Keanu Reeves y Carrie-Anne Moss se convirtieron en Neo y Trinity en Matrix, la cinta de las hermanas Wachowski se volvió un hit dentro de la ciencia ficción, y fue a finales de 2021 cuando estrenó la última entrega de la saga, Matrix Resurrecciones. El elenco volvió al set de filmación para una nueva aventura en la que también participó la actriz mexicana Eréndira Ibarra, aunque quizás ninguna escena en toda la saga fue tan épica como la de esta cinta.
En 2003 llegó Matrix recargado a la pantalla grande, una producción a escalas nunca antes vistas. Con Reeves, Moss y Laurence Fishburne de regreso al rodaje, si ya la has visto seguramente recuerdes que hay una secuencia de acción en la que Morfeo y Trinity son perseguidos por los Gemelos mientras van en carretera. La grabación fue tan intensa y se propuso a ser tan auténtica que gastaron más de 2,5 millones de dólares para hacerla realidad.
Lilly y Lana Wachowski sabían que querían crear una de las secuencias más impresionantes de los últimos años y fue así que tomaron la decisión de construir una carretera desde cero y destruyeron 300 coches para filmar la épica escena. Con el presupuesto desarrollaron una pista de aterrizaje en la Estación Aérea Naval de Alameda en California, Estados Unidos, que se componía de tres carriles por cada sentido.
El par de cineastas recibieron el apoyo de General Motors, empresa automovilística que donó 300 autos para el rodaje de esta parte de la cinta. Por supuesto que la compañía no dejó pasar la oportunidad que estaban detrás de la ambiciosa producción, así que promocionaron un comercial en el que difundieron que “General Motors donó la impresionante cifra de 300 vehículos para crear una de las escenas de persecución de coches más intensas de la historia del cine!”.
Los miembros del elenco revelaron lo peligroso que fue filmar esta escena, sobre todo para la intérprete de Trinity. Ella compartió que entrenó en una bicicleta, pero no fue preparación suficiente para grabar sobre una moto. La protagonista conducía mientras Keymaker (Randall Duk Kim) iba atrás de ella. “La vida de un pasajero dependía de ser impecable y perfecto, porque sabía que si le permitía a mi mente un momento de duda podía lastimar a otro ser humano”, comentó la también actriz de Memento. ¿Te imaginabas ese impresionante presupuesto para una sola escena?