La ciencia ficción es un género que toma inspiración de novelas muy populares para luego ser adaptadas y transformadas en grandes producciones. 2001: Una odisea en el espacio, Duna (que estrenará muy pronto su segunda parte), La guerra de los mundos y la franquicia de Los juegos del hambre, son algunas de las cintas destacadas dentro de la ciencia ficción que provienen de obras literarias y que lograron convertirse en éxitos comerciales.
Si bien es uno de los géneros favoritos del público, el cine de ciencia ficción está repleto de fracasos e intentos de hacer una buena película a partir de un gran libro. Además de tener a un gran equipo de adaptación, las producciones deben contar con un gran presupuesto, o de lo contrario, es posible que el resultado final termine siendo un rotundo fracaso. El reto puede ser aún mayor cuando se intenta llevar toda una serie de novelas a la gran pantalla y se tiene la presión de que el resto de la franquicia dependerá de su desempeño en taquillas y las opiniones de la crítica.
Como las producciones costosas que son, cualquier indicio de que una cinta será un fracaso en taquillas tiene la posibilidad de hacer que el estudio decida cancelar el resto de una franquicia. Uno de los casos más sonados ocurrió en 2011 con una cinta que fue dirigida por D.J. Caruso, que prometía ser una de las mejores franquicias de la ciencia ficción, sin embargo, terminó siendo una completa decepción. Al final del día, la decisión más sabia fue no continuar con las siguientes entregas.
Se trata de Soy el número cuatro, cinta que contó con Alex Pettyfer, Timothy Olyphant y Teresa Palmer en los personajes principales del reparto. La película estuvo basada en el primer libro de la saga "Los legados de Lorien" escrita por Pittacus Lore. Siendo que el fenómeno literario de Lore se componía de siete libros, se había pensado en extender la historia en siete películas, algo que jamás ocurrió.
Soy el número cuatro no fue un completo fracaso en taquilla ya que triplicó su presupuesto en ganancias, lamentablemente, la crítica no la recibió tan bien como se esperaba. Los comentarios fueron tan malos que el estudio se replanteó si era posible seguir adelante con la saga, y tras meditarlo brevemente, los planes para futuras secuelas fueran cancelados.
¿De qué trata Yo soy el número cuatro?
Tras la destrucción de su hogar por parte de seres de otro planeta, nueve jóvenes extraterrestres se ocultan en la Tierra a la espera de noticias. El cuarto del grupo, llamado Jonh Smith, se da cuenta de que no está a salvo. Sus perseguidores saben dónde se esconde, han acabado con los tres alienígenas anteriores y van tras su pista.
Haciendo todo lo posible para no ser descubierto, pide ayuda a Henri, el guardián que le protege. Los dos se harán pasar por padre e hijo y tendrán que huir constantemente para despistar a sus enemigos. Su nuevo destino es Paradise, una pequeña localidad de Ohio. Allí, John conoce a Sara, una joven por la que pronto comenzará a sentir algo más que una simple amistad.