Desde que comenzó a trabajar en producciones cinematográficas a finales de la primera década de los 2000, Jennifer Lawrence ganó amplio reconocimiento en Hollywood tras ser nominada al Oscar por su interpretación en Winter’s Bone y aparecer Like Crazy, pero no fue sino hasta su participación en películas de ciencia ficción cuando su popularidad se disparó a lo más alto entre las audiencias. Seguramente la recuerdas por su intervención en el cine de superhéroes y una aclamada saga, pero no todas sus cintas han sido elecciones buenas en su filmografía.
En 2011 Lawrence se convirtió en Mystique en la nueva versión de Marvel X-Men: Primera generación, dirigida por Matthew Vaughn y protagonizada por James McAvoy y Michael Fassbender; sin embargo, su papel más famoso llegaría un año después al recibir el protagónico de Los juegos del hambre para interpretar a Katniss Everdeen. La adaptación de esta serie de libros fue todo un éxito entre el público, aunque el máximo premio que ganó la actriz fue el Oscar a Mejor actriz a inicios de 2013.
Con una estatuilla dorada en la mano por Los juegos del destino y dos franquicias de ciencia ficción por delante, Jennifer Lawrence se catalogó como una de las estrellas más importantes del momento, pero no todos fueron aciertos en su carrera. Podría decirse que el 2016 estuvo lleno de malas decisiones para la intérprete, pues ni X-Men: Apocalipsis, estrenada dentro del boom del cine de superhéroes, logró figurar como un triunfo entre los críticos. Lo más sorprendente de todo es que a pesar de que fue una mala película, es otra producción de ciencia ficción de la que se arrepiente.
Ese mismo año Lawrence protagonizó Pasajeros junto a Chris Pratt, un largometraje de ciencia ficción sobre Aurora, una periodista que viaja hibernando en una nave espacial para trasladarse a otro planeta, pero su sueño es perturbado cuando Jim (Pratt), un ingeniero mecánico cuya cápsula lo levantó antes de llegar a su destino, decide despertarla para tener una compañera durante su viaje. La cinta fue todo un fracaso entre la crítica y en la taquilla, pero la actriz asegura que una de sus amigas le advirtió que no participara en ella.
Columbia Pictures
Mientras brindaba una entrevista al periódico The New York Times, la también protagonista de No Hard Feelings reveló que fue la cantante de pop Adele quien le dijo que era mejor rechazar el papel. “Me dijo: ‘Siento que las películas espaciales son las nuevas películas de vampiros’. Debí haberla escuchado”, declaró la actriz. Sin embargo, parece que no todo fue tan malo después de todo, pues un año después colaboró con el aclamado director Darren Aronofsky en ¡Madre!.
Luego de liderar X-Men: Dark Phoenix, Jennifer Lawrence tomó un retiro y se alejó de la pantalla grande por dos años, regresando en 2021 para protagonizar la divisiva cinta de Netflix No mires arriba al lado de Leonardo DiCaprio. ¿Qué opinas de Pasajeros, crees que es una de las peores películas de ciencia ficción o no es para tanto?
