Sin lugar a dudas la Biblia, Dios y la espiritualidad son elementos fundamentales en la narración de las historias humanas tanto dentro del cine como en otras artes y por ello dichos elementos han inspirado desde grandes clásicos como Los diez mandamientos, hasta musicales animados como la grandiosa película de DreamWorks, El príncipe de Egipto.
Y es que un misterio tan grande como el de lo milagros y la fe ha sido tan basto e importante para los seres humanos que a más de 2000 años seguimos celebrando la llegada de aquel Mesías palestino que nos prometió un mundo de amor, esperanza, fraternidad y unión, y cuyo viaje comenzó con un linaje que se gestó mucho antes del tiempo, a través de hombres y mujeres que con una fe inquebrantable se atrevieron a cruzaron desiertos, encarar ejércitos, separar los mares y obedecer a su Dios pese a que los requisitos de este en algunas ocasiones dolieran tanto que fueran similares a los terroríficos diluvios mortales.
Por lo tanto no es de extrañar que directores obsesionados con los dramas históricos, como lo ha sido durante décadas el mismísimo Ridley Scott, se hayan echado sobre los hombros el peso de relatar uno de los episodios bíblicos más grandes de todos los tiempos y que dio inició a la peregrinación del pueblo elegido por Yahvé; el Éxodo.
Sin embargo y pese a los esfuerzos de Scott, la cinta no fue bien valorada y por ello en FilmAffinity solo obtuvo un 5.2/10 de calificación. Aunque cuenta con un elenco conformado por Christian Bale, Joel Edgerton, John Turturro, Aaron Paul, Ben Mendelsohn, María Valverde, Sigourney Weaver y Ben Kingsley, la historia que nos presenta al judío criado como un príncipe egipcio y el favorito del faraón Seti, Moisés, no fue bien vista por la crítica y mucho menos por la administración de Egipcio, quienes decidieron censurarla debido a que en ella se habla de la esclavitud hebrea, pero no se precisan algunos detalles de la nación que vio crecer a uno de los imperios más sabios, majestuosos y poderosos de todos los tiempos.
Además, de acuerdo con la BBC, la autoridad censora de Egipto también decidió suspender la cinta porque la representación de que las famosas pirámides fueron construidas por los judíos es una afirmación históricamente discutida y controvertida.
Entre otros errores, la película de Scott sugiere que la división del Mar Rojo fue causada por un terremoto y no como un milagro realizado por Moisés, lo cual contradice la narrativa bíblica tradicional y resta punto al misterio de la fe y la grandeza de Yahvé.
Pero como en SensaCine México no nos gusta arruinar ninguna experiencia, te invitamos a ver Éxodo: Dioses y reyes para que emitas tu propio juicio y así conectes con una historia de crecimiento, desapego, valentía y fe que podrás encontrar en Netflix. ¡Qué te diviertas!.