Martin Scorsese es uno de los cineastas más reconocidos de nuestros tiempos. Desde la década de los setenta, el originario de Nueva York conquistó al público con cintas como Taxi Driver, Toro salvaje, Buenos muchachos y muchas más. La grandeza de Scorsese no puede negarse y con su última película, Los asesinos de la luna, el director demostró por qué es una figura dentro de Hollywood.
Quienes conocen de cerca el trabajo de Scorsese saben que el director tiene una lista de actores favoritos. Robert de Niro y Leonardo DiCaprio son algunos de los rostros que usualmente aparecen en las cintas de Scorsese, siendo El lobo de Wall Street, El aviador y Pandillas de Nueva York. Lo mismo ha ocurrido con Los asesinos de la luna, la última cinta de Scorsese llamada uno de sus mejores trabajos hasta la fecha.
En alguna ocasión, Scorsese quiso ampliar sus horizontes laborales y trabajar en un formato distinto al que está acostumbrado, aunque tampoco es nuevo para él. El cineasta grabó un comercial de alrededor de 70 millones de dólares, que contó con la presencia de Brad Pitt, y obviamente, las de Robert de Niro y Leonardo DiCaprio. Todo ocurrió en 2015, y el resultado final fue un video de 14 minutos y pagos de 13 millones de dólares para cada uno de los actores que aparecieron.
Vanity Fair
El spot en cuestión era para el grupo de casinos y hostelería Melco-Crown Entertainment (MCE). En específico, se intentó dar visibilidad a dos salas de juego que acababan de abrir en aquel momento: el casino Studio City en Macao y el casino City of Dreams en Manila, Filipinas. El reparto sólo era una parte ya que el anuncio contó con grandes efectos visuales, y era muy evidente el sello de Scorsese.
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El comercial contó una pequeña historia en el que Scorsese se dio vida a sí mismo para reunir a dos actores que le interesan para un mismo papel. Los primeros en competir por el trabajo son los mismísimos De Niro y DiCaprio, pero ambos decepcionan a Scorsese y éste acaba recurriendo en secreto a Brad Pitt, cuya audición resulta aún más catastrófica. Cuando los dos "rechazados" se dan cuenta de que el director les ha mentido, se van juntos a disfrutar del lugar de ensueño en el que se encuentran, mientras "Marty" se lamenta por su mala decisión y tiene que continuar con su búsqueda. Con la inflación, hoy en día, los 14 minutos del anuncio hubieran costado 107 millones de dólares.
