Justo a tiempo para Navidad, Amazon Prime Video estrenó una de sus películas más controversiales y polémicas de todo el 2023. Saltburn, protagonizada por Barry Keoghan y Jacob Elordi, es la nueva cinta de misterio y comedia que llegó a streaming y todo mundo se ha unido a la conversación sobre su lanzamiento, pues mientras que unos la aman, otros no han temido en compartir su desprecio hacia la nueva cinta de la directora.
Dirigida por Emerald Fennell, la misma realizadora que ganó el Oscar a Mejor guion original por Promising Young Woman y a quien seguramente recuerdas por su participación como Midge en Barbie, Saltburn se ha vuelto el estreno más comentado de la semana y miles de espectadores quedaron impresionados con el destino final de la cinta, sobre todo por esa peculiar escena en la que uno de los protagonistas aparece desnudo.
Comparada por su gran parecido con El talentoso Sr. Ripley, aquella cinta de 1999 liderada por Matt Damon, Jude Law y Gwyneth Paltrow, Saltburn relata la historia de Oliver (Keoghan), un estudiante de la Universidad de Oxford a mediados de la primera década del nuevo milenio, quien se obsesiona hasta extremos impensables con Felix (Elordi), uno de sus compañeros ricos de la universidad que lo invita a pasar el verano en la finca de su familia.
Contando también con las actuaciones de Rosamund Pike, Richard E. Grant y Carey Mulligan, la película estrenó en la edición 50 del Festival de Cine de Telluride en agosto y posteriormente tuvo su lanzamiento limitado en cines de Estados Unidos y Reino Unido, pero fue tras su llegada a Amazon Prime Video que la controversia explotó por completo. Más allá de que las audiencias no dejan de admirar el físico de Elordi, fue el final del largometraje lo que dejó a todos con la boca abierta. Si aún no la has visto, te avisamos que a continuación habrá spoilers.
En el desenlace vemos a Oliver bailar desnudo mientras suena “Murder on the Dance Floor” de Sophie Ellis-Bextor, luego de convertirse en el dueño de la propiedad tras la muerte de la familia. De acuerdo con Fennell vía Deadline, en el guion no estaba escrito que Keoghan bailara sin ropa, pero al presentarle la idea al también actor de Dunkerque, no dudó en aceptar el desafío, aunque significara aparecer completamente desnudo frente a la cámara.
“Se sintió como lo correcto. Es una señal de posesión, este es mi lugar. Se trata de completa confianza, ‘Yo puedo hacer lo que quiera en esta finca'”, comentó el protagonista de Los espíritus de la isla, asegurando que jamás se sintió raro, “Te olvidas de ello porque hay un ambiente tan cómodo que te da libertad para actuar”. Fennell aseguró que a pesar de que la escena estaba perfecta en la toma 7, se repitió 4 veces más para conseguir la felicidad malvada en el lenguaje corporal de Oliver. Para conocer a qué se refiere la directora, recuerda que puedes ver Saltburn en Amazon Prime Video.