Pon pausa a todo que ya es Navidad. Es momento de disfrutar de todo lo que viene con la época más pacífica del año. Si por el frío no te apetece ir al cine a ver algunos de los estrenos como Aquaman y el reino perdido, Tonantzin Guadalupe: Creación de una nación o Perdidos en la noche, entonces lo mejor será que te quedes muy cómodamente en tu casa.
Saca tu cobija más gruesa para que pases un gran rato frente al televisor o tu dispositivo favorito para que veas todo lo que las plataformas de streaming tienen qué ofrecerte. En Netflix, podrás encontrar cintas con toque navideño como Familia revuelta y Pollitos en fuga: El origen de los nuggets, o si quieres algo de suspenso, Dejar el mundo atrás, el thriller más visto de la plataforma te mantendrá pegado a la silla.
Por fortuna, la televisión abierta saca a relucir sus habilidades de selección durante Navidad, pasando clásicos de la temporada como Mi pobre angelito, Titanic y El Grinch, para despertar el espíritu navideño. Si lo tuyo son los dramas y tragedias, esta película con Will Smith te hará llorar con la historia de un hombre que se enfrenta a las adversidades de la vida para poder darle a él y a su hijo todo lo que merecen. Tienes una cita en punto de las 21:00 horas por Azteca 7 para echarte la última lloradita antes de Navidad.
Se trata de En busca de la felicidad, la cinta de 2006 protagonizada por Will Smith y su hijo Jaden. Basada en una historia real, la cinta está ambientada en el San Francisco de 1981. Todo comienza cuando Chris Gardner y su esposa, Linda (Thandiwe Newton), están teniendo problemas en su relación, así como financieros. Mientras Linda trabaja turnos dobles lavando ropa en el hotel, Chris está tratando de vender escáneres de densidad ósea, máquinas médicas especializadas que son demasiado caras para que las compren la mayoría de los médicos.
Todo se complica cuando Linda, tras mucho hartazgo acumulado, abandona a su familia. Decidido a cambiar su vida, Chris pasa seis meses trabajando en una pasantía no remunerada en Dean Witter, con el propósito de convertirse en un corredor de bolsa. Él es lo suficientemente inteligente y bueno con los números y demostró su talento resolviendo un cubo de Rubik frente a un corredor Dean Witter. Mientras estudia y se las arregla, ganando apenas lo suficiente cada semana para pagar las comidas, Chris está seguro de que lo logrará.