Dentro de los grandes estrenos de diciembre en Netflix, además de Rebel Moon (Parte uno): La niña de fuego y Pollitos en fuga: El origen de los nuggets, se encuentra Dejar el mundo atrás. La nueva película de suspenso con Ethan Hawk, Mahershala Ali y Julia Roberts, rápidamente se convirtió en la película más vista en todo el catálogo del gigante del streaming. Si aún no has visto esta cinta llena de intriga y misterio, es momento de que lo hagas ya que te quedarás con ganas de una segunda parte.
Basada en la novela del mismo nombre del autor Rumaan Alam, Dejar el mundo atrás gira en torno a la historia de la familia conformada por Amanda y Clay, quienes deciden irse de vacaciones a un lugar completamente alejado de Long Island durante un fin de semana, junto a sus hijos adolescentes, Archie y Rose. Sin embargo, cuando un repentino apagón ocurre, la familia es interrumpida por dos desconocidos, G. H. y su hija Ruth, quienes alertan que ha ocurrido un misterioso ciberataque y pide refugio en la propiedad, afirmando ser los dueños. Ahora, ambas familias se enfrentan a una complicada situación en la que deben lidiar con la crisis a su manera.
Una de las estrellas de Dejar el mundo atrás es la residencia en la que las familias pasan el tiempo mientras todo lo que conocen se está derrumbando. La casa juega un papel predominante en la trama de la película, proporcionando refugio a las dos familias que se ven obligadas a sortear los desastres apocalípticos que siguen ocurriendo en el exterior. Para muchos espectadores, la casa de vacaciones es un elemento sumamente importante ya que representa un microcosmos de la sociedad que refleja todo lo que sucede en el mundo real.
Atlas of Wonders
Algo interesante de la película es que la lujosa mansión que también es una de las protagonistas de Dejar el mundo atrás es completamente real. La residencia está ubicada en el pueblo de Old Westbury y se construyó en 2019. La moderna casa de campo cuenta con 483 metros cuadrados y fue diseñada exclusivamente por el arquitecto John Patrick Winberry de la firma The Up Studio. Llamado "The Open Corner House" (La casa de la esquina abierta), el proyecto comenzó después de que un incendio destruyera la finca de estilo francés existente.
Curbed
Las áreas de sala, cocina y comedor fluyen entre sí, complementadas con mucho mármol, madera natural, cuero y herrajes metálicos. En la suite principal, que se eleva sobre la piscina, hay un paisaje marino ubicado directamente detrás de la cama. Si miras de cerca, notarás que las olas se vuelven más feroces a medida que aumenta la tensión en la película. Aunque los Scott están en su propia morada, terminan refugiándose en la suite de los suegros en el sótano, que fue creada específicamente para la película. El espacio en forma de L se distingue por su resplandeciente piscina de borde infinito, ventanales del piso al techo, paredes revestidas de arte y fachada de ladrillo blanco brillante.
