Lo sabemos, también tenemos la misma cara de sorpresa. Antes de terminar el año, los actores y conductores de televisión, Adal Ramones y Mauricio Castillo, revelaron que la famosa entrevista de Britney Spears en Otro Rollo allá por 2002, fue un completo engaño, pues la cantante de “Toxic” y “....Baby One More Time”, jamás fue a los sets de Televisa.
El chismecito del día surgió durante el programa Pinky Promise de Karla Díaz, donde la conversación llevó a las entrevistas más famosas que sucedieron en el entonces programa nocturno más famoso del país.
Britney Spears nunca fue a Otro Rollo, esto es real. La grabamos en el Four Seasons. Nunca fue a Televisa. Nunca bajó las escaleras.
El primero en revelar este sorpresivo dato fue Mauricio Castillo, esto mientras Adal Ramones parecía que no quería contar más detalles, pero todo cambió cuando el creador de “¿Quiéren monólogo?” compartió más detalles, incluyendo qué otras estrellas internacionales tampoco fueron a Televisa.
Solamente hubo tres o cuatro artistas que no pudieron ir por el día de grabación: Ronaldinho, Antonio Banderas, Elton John, Los Ángeles de Charlie y NSYNC.
Así fue como Adal Ramones grababa las entrevistas de Otro Rollo
Es importante recalcar que sólo fueron estos casos extraordinarios los que no terminaron por realizarse en los estudios de Televisa, el resto sí, por lo que Sylvester Stallone, Will Smith o Robbie Williams, sí estuvieron en Otro Rollo. Una vez aclarado este punto, Adal Ramones compartió el proceso que seguía la producción para recrear el foro del programa en diversos hoteles.
“Era una escenografía que llevábamos a los hoteles y todos los que nombré bajaban por una escalera, llegaban al set, los entrevistaba y ellos fingían que veían al público. Cuando en el programa en vivo decíamos: “Señores, Britney Spears”, Lalo corría la cinta, Britney bajaba por las escaleras, Lalo switcheaba”, dijo el conductor.
Con su característico sentido del humor, Lalo España agregó: “Era un engaño para el televidente, de la chingada”. Por supuesto todo esto fue contado en tono relajado, digamos que fue una confesión amistosa que tardó en llegar alrededor de 21 años, por lo que todo este tiempo vivimos engañados por la magia de la televisión.