The Big Bang Theory es una de las comedias más queridas por el público. Tras 12 temporadas al aire y más de 200 capítulos estrenados, la serie protagonizada por Jim Parsons, Kaley Cuoco y Johnny Galecki terminó en 2019. Sin embargo, como un obsequio de consolación, los fanáticos se quedaron con Young Sheldon, una precuela sobre la infancia del personaje Sheldon Cooper, que hasta la fecha continúa emitiéndose y estrenará su séptima y última temporada en febrero de 2024.
Una de las razones del retiro de Jim Parsons fue porque el también actor de Los chicos de la banda quería dejar atrás sus días como el físico sabelotodo y dedicarse a nuevos proyectos. Desde su salida de The Big Bang Theory, Parsons ha tenido participaciones en las películas Ted Bundy: Durmiendo con el asesino, prestando su voz en Wifi Ralph, y A Kid Like Jake junto a Claire Danes y Octavia Spencer. Parsons también ha aparecido en otras series de televisión como Hollywood de Ryan Murphy.
Aunque de alguna manera Parsons ha logrado tomar distancia de Sheldon Cooper, para muchos siempre seguirá siendo el protagonista de The Big Bang Theory quien es genio de la física y un amante de la cultura popular y los cómics, con un cariño especial por Star Trek. Cuando se pasa tanto tiempo dando vida a un mismo personaje, para muchos espectadores puede resultar sumamente difícil encontrar las diferencias con el actor que lo interpreta. Por esta razón, algunos fanáticos de The Big Bang Theory se han sorprendido al descubrir que Parsons y Cooper no tienen prácticamente nada en común.
En una entrevista para la revista Time, Parsons respondió a la pregunta de cuánto parecido hay entre él y Sheldon Cooper. "Me preguntan mucho sobre cosas científicas, por supuesto. Entonces digo: '¡Estás bromeando!'", dijo Jim sobre la poca afinidad que tiene con Sheldon a pesar de haberlo interpretado por más de una década en la televisión. Sin embargo, la sorpresa más grande la dio al mencionar que jamás en su vida ha visto Star Trek y que no conoce el legendario programa británico de Doctor Who.
De hecho, en muchas ocasiones, Parsons interpretó al científico sin siquiera saber exactamente de qué hablaba. Siendo tan distinto a su personaje, para lograr ser lo más convincente posible, Parsons desarrolló un método con tarjetas didácticas para no olvidar sus diálogos. "Caminaba por mi casa practicándolas como un bailarín de ballet aprendía sus movimientos. Esto se debe principalmente a que apenas entiendo lo que digo", dijo Parsons sobre cómo actuaba sin comprender del todo las frases de su personaje.