De las películas de espías como Kingsman: Servicio secreto, Misión imposible o Bourne: El ultimátum, además de ser una de las franquicias de más larga duración en el cine, James Bond es una de las más populares. A lo largo de varias décadas, el agente 007 ha tenido varios rostros, entre ellos, Sean Connery, Pierce Brosnan, Roger Moore y más recientemente, Daniel Craig, quien terminó su periodo como agente secreto en Sin tiempo para morir.
Ahora, sin la presencia del también actor de Glass Onion: Un misterio de Knives Out, la saga de 007 se ha quedado sin protagonista. Muchos son los nombres que se dice están en la lista de actores con miras a interpretar a Bond son los de Idris Elba, Tom Hardy y Tom Hiddleston. Sin embargo, el rumor más creíble hasta la fecha es que la estrella de Kick-Ass, Aaron Taylor-Johnson, podría ser el próximo actor en dar vida al intrépido y valiente Bond.
Quien también está en la carrera para ser James Bond es un actor de Bridgerton, quien se ganó el amor del público internacional en la serie de época de la alta sociedad londinense creada por Shonda Rhimes. Lo cierto es que esta estrella no pone todos los huevos en la misma canasta y ya está preparada para interpretar a otro gran personaje del mundo de los agentes secretos, en caso de que los productores escojan a otro de sus colegas para el próximo 007.
El actor británico-zimbabuense, Regé-Jean Page, descubierto en la serie de Netflix Bridgerton, será quien interpretará al detective y ladrón Simon Templar del reboot de El santo. No se trata de la figura de la lucha libre mexicana, sino de la adaptación de las novelas de aventuras de la escritora Leslie Charteris. Lanzada en la década de 1920, El santo se volvió un personaje sumamente popular entre el público, apareciendo en cómics, series y más tarde, en películas y en la televisión.
El santo fue interpretado por Roger Moore en una serie de televisión antes de convertirse en James Bond, mientras que la cinta del mismo personaje fue protagonizada por Val Kilmer. En El santo, Estados Unidos y Rusia aún son rivales. Cuando la doctora Emma Russell descubre una fórmula científica con la que se puede crear energía, el ruso Ivan Tretiak hará todo lo posible por conseguir esa información de valor incalculable. Simon Templar, un espía profesional, será el responsable de acercarse a la inteligente científica y obtener lo que Tretiak quiere. Para ello, se hace pasar por un importante científico que incluso no duda en seducir a la investigadora para lograr su objetivo.