George Lucas revolucionó el género de la ciencia ficción con su enorme éxito Star Wars, una de las franquicias más rentables en la historia del cine, misma que hasta la fecha sigue siendo parte importante del folclore mundial. ¿Eres fan de la ciencia ficción? Entonces debes echarle un vistazo a esta terrorífica historia de aventuras espaciales de los años 80.
Es importante mencionar que no todo lo que se parece es necesariamente una copia, muchos de los grandes cineastas siguen encontrando inspiración en otras películas, obras literarias y demás artes. Esto no los hace copiones, el chiste es saber cómo adaptar una idea.
La historia de ciencia ficción de los años 80 obligada para fans de Star Wars
Fue así como llegó Spaceballs de Mel Brooks, una película que tomó un montón de inspiración en Star Wars: Una nueva esperanza, Star Wars El Imperio Contraataca y Star Wars: El regreso del Jedi. La enorme diferencia llega cuando vemos el tono humorístico de esta cinta.
Sí, en todo momento es una sátira a Star Wars, pero lo hace con un toque especial, pues mezcla algo de horror con la decisión de sus personajes, un gran sentido del humor que atendía a los gustos de los años 80 y de paso mantenía el concepto de una historia de ciencia ficción.
¿De qué trata Spaceballs?
La historia inicia con la contaminación del aire en Planet Spaceball está adquiriendo formas cada vez más preocupantes. Los residentes necesitan oxígeno urgentemente. El presidente Skroob (Mel Brook) decide simplemente succionar el oxígeno necesario del planeta menor Druidia. Sin más, hace secuestrar a la princesa Vespa (Daphne Zuniga) de Druidia por el malvado Lord Helmchen (Rick Moranis).
De esta manera, el tortuoso Skroop promete forzar la salida de aire fresco. Pero el cálculo se hizo sin el intrépido y despistado Capitán Lone Starr (Bill Pullman) y su copiloto Waldi (John Candy). Tienen la tarea de liberar a Vespa de las manos de Lord Helmchen. Está a punto de comenzar una aventura a través de una galaxia muy, muy lejana, en la que Master Yogurt (también Mel Brooks) tendrá gran importancia.