La familia real siempre ha generado conversación, sin embargo, la muerte de la princesa Diana fue un evento que marcó la historia y, a la fecha, es recordado con mucha aflicción. Si bien, hay muchas películas que abordan este suceso, The Crown, la exitosa serie de Netflix, ha preparado el camino para presentar dicha tragedia en su sexta temporada con Elizabeth Debicki, quien no la pasó nada bien durante la filmación.
Después de siete años de transmisión, la serie de Peter Morgan está por llegar a su fin. Tras varios retrasos y cambios en el guión, a raíz de la muerte de la Reina Isabel y la coronación del Rey Carlos III, los nuevos episodios por fin verán la luz, los cuales abarcarán un período de 1997 hasta principios de la década de 2000, donde el foco estará en el trágico destino de Lady Di y lo que su muerte significó para la corona.
Después de la interpretación de Emma Corrin, el papel quedó a manos de Debicki, quien se encargó de interpretar la parte más oscura en la vida de la princesa. Sin embargo, mucho antes de obtener el papel, la actriz admitió que ya se sentía conectada con la princesa, incluso, lloró desconsolada cuando se dio a conoce su muerte el 31 de agosto de 1997.
En ese entonces Lady Di viajaba con su pareja, Dodi Al-Fayed, cuando sufrieron un terrible accidente automovilístico en el túnel del Pont de I'Alma, al norte del río Sena en París. La pareja viajaba a gran velocidad mientras huía de los paparazzi, un momento catastrófico, que Morgan prometió tratar de la manera más respetuosa posible.
Para la actriz de Guardianes de la Galaxia Vol 3, filmar esa escena fue muy difícil, ya que no podía imaginar el terror que sintió Diana: "Es bastante horrible y excesivo acosar a alguien de esa manera" afirmó en declaraciones a The Hollywood Reporter. Una sensación que también compartió su compañero, Khalid Abdalla, actor de Dodi Al-Fayed. "Cada vez que veía una scooter me estremecía. Imaginar que vives eso, día tras día es algo impactante".
Asimismo, el resto del elenco quedó conmovido por esta escena, Jonathan Pryce que interpreta al príncipe Felipe de Edimburgo, recuerda el momento en que todos vieron el corte final: "De alguna manera, al verlo, pensé, debido a nuestra reacción, que lo habíamos hecho bien, que había una gran carga emocional en él para todos. Lloré de verdad cuando ella murió y lloré cuando lo vi en la pantalla. Es realmente extraordinario", aseguró. Y ahora, podrás ver este triste momento a partir del 16 de noviembre en Netflix.