Desde que comenzó la segunda temporada de Loki en Disney Plus, todo parecía muy confuso y era un gran reto seguir el hilo de la historia protagonizada por Tom Hiddleston y Sophia Di Martino. Después de seis episodios, las cosas parecen ser más claras, pero aún hay muchas dudas que resolver. Toma nota, porque a continuación te explicaremos el episodio final y compartiremos algunas teorías. Eso sí, habrán muchos spoilers.
Salvar la línea de tiempo sagrada
La estabilidad del multiverso ahora depende de Loki y en el penúltimo episodio descubre que puede controlar su deslizamiento en el tiempo, lo cual será muy útil, ya que gracias a eso consigue viajar al pasado en la AVT, justo antes de que el Telar Temporal explote. Esto lo llevará a viajar una y otra vez en el tiempo, incluso pasa siglos aprendiendo sobre ciencia e ingeniería.
El Dios del engaño comprende que arreglar el Telar Temporal no es suficiente para contener los nuevos hilos cronológicos. Para lograrlo tiene que viajar al pasado y evitar que Sylvie (Sophia Di Martino) mate a El Que Queda para que la línea de tiempo sagrada y la TVA permanezcan intactas. Sin embargo, impedir ese suceso provocaría que las demás ramas se eliminen.
Cuando finalmente llega con Sylvie y le explica lo que está en juego, ella se niega, desatando un bucle de peleas. Al final, El Que Queda la congela y revela que siempre supo sobre el deslizamiento de Loki y todo estaba planeado para que él regresará. El Dios del Engaño siempre fue una pieza dentro del juego de El Que Queda.
Pronto entendemos que el Telar Temporal es un dispositivo de seguridad que eliminará todas las líneas de tiempo que se supone que no deberían estar allí, a excepción de la línea de tiempo sagrada. Con esta nueva información, para Loki es lógico destruir el Telar, pero hacerlo implicaría una guerra multiversal con el resto de las variantes de Kang, (el personaje de Jonathan Majors), que sin el control del Telar de la AVT, serían liberados, desatando una terrible batalla que provocaría el fin del multiverso.
El Sacrificio
Siguiendo esta lógica, si Sylvie mata a El Que Queda, surgirán ramificaciones infinitas, el telar fallará y habrá la destrucción del multiverso, por lo que solo queda una opción: matar a Sylvie. Sin embargo, Loki se rehúsa a hacerlo y piensa en una nueva solución. Para ello, viaja en el tiempo hasta la primera vez que conoció a Mobius (Owen Wilson), uno de los momentos más enternecedores de la temporada. En este encuentro, Mobius le cuenta la historia sobre el sacrificio de Renslayer (Gugu Mbatha-Raw), un decisión que aún lo atormenta pero que fue vital para lograr el bien común.
Después de esta charla, Loki se traslada al momento en que todo comenzó a desmoronarse y las líneas de tiempo comenzaron a desaparecer, cuando solo estaban él y Sylvie, quien no tardó en entender que debía morir, pero se rehúsa a hacerlo, dispuesta a luchar hasta el final, una conversación que lleva a Loki a entender que aún hay una solución.
Una nueva oportunidad
Loki viaja de regreso al momento en el que Victor Timely intenta arreglar el Telar y hace algo que nunca había hecho antes: se adelanta y baja las escaleras en lugar de Timeley. Camina por la pasarela de la perdición exponiéndose a la radiación temporal y aquí sucede lo que a todos nos dejó boquiabiertos.
Poco a poco su ropa se va desintegrando y surge un nuevo traje similar al que vimos en Los Vengadores, incluyendo ¡el casco con cuernos! Esto solo sirve para reafirmar el gran poder que tiene. Con su forma divina, Loki usa sus poderes para destruir el Telar, haciendo que las ramas se desaten y empiecen a morir. Pero también agarra una por una, y las revive con su magia, las cuales ahora tienen un color verdoso.
Sigue su camino, ahora hacia el horizonte, donde se abre una grieta que lo conduce al fin de los tiempos. Luego llega al trono dorado y una vez allí, une todas las líneas temporales para permitir que se expandan en un árbol con infinitas ramificaciones. Loki descubre que es el Dios de las Historias, el Dios del Tiempo y el que mantiene el multiverso a salvo, un rol que ya se le había asignado desde los comics.
De esta manera el multiverso está a salvo, la clave está en mantener todas las realidades unidas para que no colapsen. Su sacrificio para que el resto pueda vivir, es quedarse aislado por la eternidad en su trono en el centro del tiempo, sosteniendo las infinitas realidades que son el entramado de un árbol. Una referencia la mitología nórdica, sobre la figura del Yggdrasill, el árbol de la vida que mantiene unidos a los Nueve Mundos y de la que una vez Thor (Chris Hemwsorth) le habló a Jane (Natalie Portman).
¡Una nueva forma de ver streaming! Sky+, la nueva plataforma con inteligencia artificial llega a MéxicoEl futuro de Loki en el MCU
Para este punto, Miss Minutes (Tara Strong) vuelve a ser la misma que antes, mientras que Mobius decide abandonar su puesto, pero no sin antes asegurarse de que ninguna de las variantes de El Que Queda conozca la existencia de la TVA y así evitar otra guerra multiversal.
Al igual que Mobius, Sylvie decidió salir por una puerta del tiempo. Mientras tanto, desde su trono, Loki sonríe, demostrando que ve y oye cómo transcurren las vidas de todos, siguiendo, de alguna forma, unido a ellos. Por ahora no se ha confirmado si está es la última aparición de Tom Hiddleston en el MCU, pero, sin duda, este episodio funciona como cierre de su personaje, incluso esta mañana se confirmó que no habrá tercera temporada.
Su personaje es uno de los más entrañables de la compañía y aunque no está confirmado en otros proyectos, no descartamos que vuelva a ser parte del MCU, sobre todo ahora que Marvel ha considerado traer de regreso a Tony Stark (Robert Downey Jr) y al Capitán América de Chris Evans. Además, aún con el sacrificio del Dios del Engaño, todavía hay varios Lokis en la línea de tiempo, por lo que alguno de ellos podría aparecer en una línea del MCU, sobre todo considerando que podría desatarse otra guerra multiversal con Avengers: The Kang Dynasty y Avengers: Secret Wars.