Denzel Washington está a punto de regresar a la pantalla grande con El justiciero 3, el capítulo final de la única trilogía en la que ha participado como actor. La película de Antoine Fuqua, en la que se reencuentra con Dakota Fanning, presenta la conclusión de la historia de Robert McCall después de atravesar oleadas de violencia, acción e inquietantes formas de hacer justicia.
Con el estreno de la película (que podrás disfrutar a partir del jueves 12 de octubre en Cinépolis y Cinemex), algunos de los seguidores del actor están aprovechando el tiempo para revisitar no solo las otras dos películas de la franquicia, incluyendo la violenta El justiciero 2, sino también están profundizando en los anteriores y memorables trabajos del ganador del Oscar por los largometrajes Tiempos de gloria y Día de entrenamiento.
Entre las producciones en las que trabajó como actor, su mayor recaudación está ligada a uno de los grandes realizadores del cine contemporáneo: Ridley Scott. Se trata de Gánster americano, una película de 2007 que presenta el impacto de la Guerra de Vietnam en Estados Unidos a principios de los años 1970 debido a la corrupción policial en Nueva York. Con la aprobación de las autoridades policiales, la mafia trafica con drogas, sin estar realmente amenazada.
¿Por qué demandaron a Denzel Washington luego de protagonizar 'Gánster americano'?
En este contexto, Frank Lucas (Denzel Washington), aprendiz de uno de los mayores líderes negros de la posguerra, salta a la fama y aprovecha la muerte de su mentor para hacerse cargo del liderazgo del narcotráfico en Nueva York, mientras él vende un producto más puro y más barato. Lucas pronto se convierte en una celebridad en la ciudad, superando a sus competidores en el mercado en el que opera. Pero Richie Roberts (Russell Crowe), un detective despiadado, decide actuar para perturbar el negocio de Lucas.
Basada en una historia real, los posibles individuos que contaron sus historias en la trama decidieron demandar a los profesionales involucrados en la película por difamación, ya que había inconsistencias entre la narrativa cinematográfica y los casos reales. Sin embargo, un juez federal desestimó la demanda de 55 millones de dólares presentada por ex agentes de la DEA contra el estudio cinematográfico que hizo Gánster americano.
Los ex agentes de la DEA (Louis Diaz, Gregory Korniloff y Jack Toal) demandaron en 2008 a NBC Universal, propiedad mayoritaria de General Electric Co, por afirmar falsamente que la película se basó en una historia real y por dañar la reputación de los agentes. Un portavoz de Universal Pictures dijo que la compañía estaba "satisfecha" con la decisión. "Estamos contentos de que este asunto haya llegado a una conclusión rápida y decisiva", afirmó.