Ya pasaron más de 15 años desde que Crepúsculo de Catherine Hardwicke se estrenó en cines y nuestras vidas cambiaron por completo. No solo nos mostraron a un vampiro interpretado por Robert Pattinson (que todavía le sigue robando el corazón a millones de personas), sino que también nos dejaron un legado de películas que además de darnos interminable material para memes, nos originó muchas preguntas. Todos sabemos que se trata de un romance de ficción, pero aún así nos da curiosidad saber el por qué de las cosas, así que ¿quién mejor para responder que la autora de los libros?
Stephenie Meyer escribió la saga de Twilight y una vez que llegó al cine, su impacto literario y cultural se catapultó de manera impresionante. Desde 2008 hasta 2011 vimos a Pattinson y Kristen Stewart darle vida a Edward Cullen y Bella Swan, pasando desde sus incómodos encuentros en la preparatoria hasta su matrimonio y el nacimiento de su hija. Nadie se imaginó que nuestra tímida y apartada protagonista daría a luz a una niña mitad humano mitad vampiro, pero lo logró y vaya que le dio problemas.
La última novela de la serie de libros fue adaptada en dos partes, siendo Amanecer Parte 1 la primera película que se estrenó. En ella podemos ver cómo finalmente Edward y Bella se casan, pero también fuimos testigos de algo que fue inédito: la primera vez que tuvieron un encuentro sexual. Luego de contraer matrimonio, ambos viajaron a la isla de Esme para su luna de miel y fue ahí donde tuvieron sexo, específicamente el 14 de agosto. Sin embargo, su hija nació el 11 de septiembre, así que no podemos evitar preguntarnos: ¿qué tipo de embarazo fugaz tuvo Bella?
El personaje interpretado por Stewart nota el 31 de agosto que su periodo lleva cinco días de retraso, por lo que si suponemos que Bella tuviera un periodo regular, eso significaría que Renesmee (Mackenzie Foy) fue concebida el día que tuvieron relaciones sexuales por primera vez. Esto nos indica que el proceso de gestación duró solo 28 días, ocho meses menos que lo normal para un ser humano. Definitivamente fue un embarazo sumamente rápido, pero se debe a que su hija no es una niña normal, sino un híbrido.
Al quedar embarazada de Edward, Bella procreó a un ser que era mitad humano y mitad vampiro, denominado como dhampir; pero esto no es lo más desconcertante, sino que a tres días de nacida, Renesmee ya se veía como una bebé mucho más grande de lo que en realidad era. Su gestación de casi un mes y el rápido crecimiento de Renesmee recae en que, tal como su papá, necesitaba de sangre humana para sobrevivir, así que absorbió casi toda la sangre de su madre y por eso quedó literalmente en los huesos.
Fue por eso que tras el nacimiento de la niña, Bella se transformó en vampiro al recibir sangre inyectada de Edward. Luego de ver su estado de salud, nos queda más que claro que su embarazo fue más sufrimiento que felicidad, pero esas son las consecuencias de enamorarse de un Cullen, ¿no crees?