Con Terminator y Depredador, Arnold Schwarzenegger se ganó un lugar como una de los actores de acción más icónicos, al lado de grandes como Sylvester Stallone y Jean-Claude Van Damme. Fuera de los sets con escenas llenas de adrenalina, el actor de origen austriaco intentó probar con otros géneros, reinventándose a sí mismo en cintas de comedia como Un detective en el kínder, El regalo prometido y hasta en el universo de superhéroes con Batman y Robin como el Señor Frío. Sin embargo, dentro de la larga trayectoria de Schwarzenegger, existe una cinta particularmente vergonzosa para él.
En 1993, el exgobernador de California protagonizó la cinta cómica de El último gran héroe. La película cuenta la historia de Danny, un niño de la ciudad de Nueva York cuyo único interés es ir al cine de su amigo Nick para ver a su héroe de acción favorito: Jack Slater, encarnado por Schwarzenegger. Una noche, Danny visita a Nick para ver nuevamente a Jack Slater en la pantalla. Ahí, Nick le obsequia a Danny un ticket dorado que supuestamente tiene poderes mágicos. Inesperadamente, el boleto hace que Danny entre a la película para ayudar a Slater a luchar contra los villanos de la película.
La situación se complica cuando el villano de la cinta roba el ticket de Danny para trasladarse al mundo real. Dany intenta seguirlo junto a Slater, quien se da cuenta que su realidad no es más que un cuento ficticio. A diferencia de otras de sus cintas, El último gran héroe fracasó rotundamente en taquillas, recaudando 50 millones contra un presupuesto de más de 85 millones de dólares. Según el propio ex fisicoculturista, a 30 años de haberse estrenado, la mala reputación de la cinta aún lo persigue, sobre todo porque su colega, el famoso director James Cameron, ha añadido sal a la herida.
En su serie documental autobiográfica de Netflix, Arnold, Arnold Schwarzenegger habló de la "terrible" experiencia de no tener un éxito en taquilla. "Duele. Hiere tus sentimientos", dijo Schwarzenegger, incluso 30 años después de que ocurrió. Sin embargo, a pesar de que puede parecer que con tantas películas, nada ni nadie podría afectar la actitud de Schwarzenegger, con esta cinta ocurrió todo lo contrario. "Fue vergonzoso (...) No quería ver a nadie en una semana", comentó Schwarzenegger.
¿Pero qué fue lo que dijo el director de Titanic que lo hizo sentir tan mal? "Parecía que estaba llorando en la cama. Creo que realmente lo sacudió", dijo Cameron en la docuserie de Schwarzenegger. Por supuesto, Schwarzenegger superó el flop en algún momento ya que un año después de El último gran héroe, tuvo un gran éxito con Mentiras arriesgadas de James Cameron.