Harry Potter fue centro de varios escándalos amorosos que se revelaron paulatinamente, como el amor platónico entre Emma Watson y Tom Felton, sin embargo, hubo un triángulo amoroso que incomodó a la mayoría de la producción y que tiene que ver con Kenneth Branagh, protagonista de Caceria en Venecia.
En 1998, el actor contrajó matrimonio con Emma Thompson con quien tenía una relación de ensueño, convirtiéndose en una de las parejas más queridas del espectáculo británico, incluso muchos fans solían llamarlos el dueto Ken y Em. Pero su matrimonio llegaría a su fin luego de que Kenneth tuviera una amorío con su coprotagonista de Frankestein: Helena Bonham Carter. Años después los tres coincidirían en las grabaciones de Harry Potter.
En 1994, Branagh y Bonham Carter interpretaron a la pareja protagonista en Frankestein, pero como suele suceder en algunos rodajes, su amor traspasó la pantalla, lo que lo llevó a terminar su matrimonio con Thompson en 1995. La nueva pareja no duró mucho tiempo y en 1999 se divorciarón, pero el destino volvería a cruzar su camino en una nueva película.
Por un lado, el actor fue fichado para interpretar a Gilderoy Lockhart, el apuesto profesor de Defensa Contra las Artes Oscuras en Harry Potter y la cámara secreta; mientras que Thompson interpretaría a la profesora de adivinación Sybill Trelawney y Bonham Carter a la malvada Bellatrix. Los tres llegaron a coincidir en algunos rodajes, en especial, las aclamadas actrices, lo cual fue una experiencia un tanto incómoda para los involucrados y también para el resto de actores que conocían la historia.
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La prensa llegó a tocar el tema con Thompson, quien no tomó bien su divorcio con el actor de Muerte en el Nilo, sin embargo, aseguró que ya había dado por concluida esa etapa de su vida. "No tiene sentido. No tengo la energía para hacerlo. Helena es una mujer maravillosa y Ken es un hombre con muchas cualidades. Es todo", fue la respuesta con la que finalizó este dilema amoroso.
