Netflix tuvo uno de sus estrenos más exitosos la semana pasada con la llegada de One Piece, la nueva serie live-action que vuelve a adaptar la icónica historia sobre aventura y piratas creada por Eiichiro Oda. Iñaki Godoy es el líder del elenco al interpretar a Monkey D. Luffy, pero los demás actores también han fascinado a las audiencias que crecieron viendo el anime o leyendo el manga; no por nada la serie televisiva rápidamente se convirtió en uno de los mejores lanzamientos de la plataforma.
Superando a Stranger Things y Merlina, el live-action de Steven Maeda no solo sorprendió a todos los fanáticos de esta historia, sino también a quienes creían que el gigante del streaming fracasaría una vez más llevando a su servicio una readaptación de un clásico, como sucedió con Death Note. Pero parece que la maldición finalmente terminó y en gran parte se debe a la supervisión de Oda y su trabajo cercano con los desarrolladores de la serie.
Conseguir al elenco de la producción fue uno de los elementos más complejos, pues Monkey D. Luffy y los Sombreros de Paja ya figuran como algunos de los personajes más emblemáticos del anime. El actor mexicano Iñaki Godoy fue uno de los seleccionados, pero los demás actores jóvenes también recibieron el voto de confianza del mangaka. Cada uno de ellos puso lo mejor de sí mismos para llevar al formato live-action los icónicos héroes de dicha historia, pero desarrollar los talentos de los piratas no fue tan sencillo como se ve en la pantalla.
Durante una entrevista con Netflix, los actores se desafiaron entre ellos mismos a poner a prueba los talentos de sus personajes y no todo salió como se esperaba. Taz Skylar, quien interpreta a Sanji, el cocinero de la tripulación, los retó a picar cebolla en diferentes técnicas y sin llorar; algunos no pudieron con el desafío pues no eran tan habilidosos con el cuchillo, pero tuvieron su propia oportunidad para vengarse.
La siguiente fue Emily Rudd, quien al igual que Nami, los desafió a dibujar un mapa para orientarse a un tesoro secreto, aunque en realidad ninguno dibujaba tan bien como ella. Pronto las cosas comenzaron a subir de intensidad y llegó el turno de Jacob Gibson de motivarlos a que mostraran su habilidad con la resortera, tal como Usopp. Lamentablemente la actividad fue un fracaso, pues ninguno pudo atinarle a las botellas de vidrio que era el principal y único objetivo.
Y por último fue el momento de Iñaki de retar a sus compañeros para ver si eran tan elásticos como Luffy. La prueba consistía en usar unos brazos de goma y mover vasos llenos de agua de un barril a otro sin derramar una sola gota. Casi nadie pudo realizarlo, pero Skylar dejó boquiabiertos a todos cuando logró trasladar un vaso a otro lugar sin tirar nada de agua. ¿Quién se lo hubiera imaginado? Solo hizo falta Arata Mackenyu para ver si lograba superar a su coprotagonistas como Zoro.