Si bien el verano cinematográfico nos ha ofrecido atractivos relatos como Misión imposible 7, Indiana Jones y el Dial del Destino y La noche del demonio: La puerta roja, en las últimas semanas la taquilla ha estado dominada por Barbie de Greta Gerwig y Oppenheimer de Christopher Nolan, este fin de semana llega a las salas de Cinépolis y Cinemex una película de animación que cautivará a los más pequeños y robará varias sonrisas al público adulto.
Guardianes del Museo, dirigida por Vasiliy Rovenskiy, se centra en el joven gato Vincent que, tras huir de una inundación, encuentra refugio en el Museo Hermitage en San Petersburgo. Allí, se une a un grupo de gatos élite que protege el museo de roedores. Cuando la Mona Lisa llega al recinto y está en peligro de ser robada por ratones, Vincent deberá usar su ingenio para proteger el cuadro.
No es la primera vez que el famoso cuadro de Leonardo da Vinci aparece en el cine. La Mona Lisa ha sido crucial en películas como El código Da Vinci de Tom Hanks y Audrey Tautou, El secreto de Thomas Crown de Pierce Brosnan y Una noche en el museo 2 de Ben Stiller. Al ser considerada la pieza artística más famosa en la historia de la humanidad, se ha convertido en un símbolo icónico y codiciado, y muchas de estas películas hacen referencia o retoman el robo ocurrido a principios del siglo XX.
El robo de la icónica obra de Leonardo da Vinci inspiró la película animada 'Guardianes del Museo'
El 21 de agosto de 1911, el ladrón de La Gioconda, un empleado italiano del museo Louvre llamado Vincenzo Peruggia, logró sacar el cuadro del recinto sin ser detectado. Peruggia, vidriero del museo, era un nacionalista italiano que creía que la obra debía ser devuelta a Italia, ya que consideraba que el cuadro había sido robado por Francia durante la ocupación napoleónica. Para llevar a cabo su plan, se escondió en el museo durante la noche y esperó hasta que el lugar estuviera vacío.
Una vez dentro de la sala donde se encontraba La Gioconda, Peruggia la descolgó del muro y la escondió debajo de su ropa. Luego, salió del museo sin levantar sospechas. Aunque el robo fue descubierto al día siguiente, el ladrón mantuvo el cuadro en su apartamento en París durante más de dos años. El suceso causó una gran conmoción en todo el mundo y se convirtió en un caso de alto perfil. La policía francesa y la Interpol iniciaron una intensa búsqueda para recuperar la obra maestra del Renacimiento.
Tras el robo, la afluencia de visitantes al Museo del Louvre se multiplicó, ansiosos por contemplar el espacio vacío en el Salón Carré del museo. Finalmente, en 1913, La Gioconda fue recuperada en Florencia, Italia, después de que Peruggia intentara venderla a un coleccionista italiano. El robo y la posterior recuperación de La Gioconda aumentaron aún más su fama y contribuyeron a su estatus de obra de arte más famosa y valiosa del mundo. Hoy en día, la pintura está protegida en el Museo del Louvre y es uno de los tesoros más preciados de la historia del arte; es un auténtico icono popular, reproducido hasta la saciedad, y su fama perdura en la actualidad.