En los últimos meses Netflix ha superado las expectativas con producciones como One Piece o La caída de la casa Usher, y recientemente La luz que no puedes ver, serie bélica que está arrasando. Y si te gustó esta nueva apuesta, entonces tienes que echarle un ojo a esta megaproducción de 70 millones de dólares y 3 horas de duración.
Se trata de la cinta Salvando al soldado Ryan, dirigida por Steven Spielberg y estrenada en 1998, considerada una de las mejores películas de su carrera gracias a la recreación realista e intensa de una de las mayores operaciones militares de la historia.
Ambientada en la invasión de Normandía durante la Segunda Guerra Mundial, la película se centra en el soldado estadounidense James Ryan, el único superviviente de sus cuatro hermanos que han muerto en la guerra. Ryan se encuentra desaparecido tras el desembarco en Normandía y la misión es encontrarlo y llevarlo junto a su familia para darle un poco de consuelo luego de sus terribles pérdidas. El encargado de la misión es el capitán John Miller, interpretado por Tom Hanks, quien arriesgará su propia vida y la de su equipo para devolver a Ryan sano y salvo.
Más allá de ser una película imperdible, Salvando al soldado Ryan es recordada por haber utilizado el 20 por ciento de su enorme presupuesto en una escena que únicamente duró 23 minutos. Para la impactante secuencia de Omaha Beach, que representaba un décimo de duración de las casi tres horas de la película, se invirtieron aproximadamente 12 millones de dólares. El presupuesto total aproximado con el que Spielberg contaba para Salvando al soldado Ryan era entre 65 a 70 millones de dólares.
Además de costoso, el rodaje de esta escena le llevó al equipo de producción de dos a tres semanas para completarlo. En las grabaciones participaron aproximadamente 400 miembros del equipo y más de mil extras, así como más de mil muñecos increíblemente realistas para aparentar a soldados en la playa.
Y para hacerlo aún más creíble, Spielberg empleó a 30 personas cuyas extremidades habían sido amputadas para dar vida a los soldados que habían perdido extremidades, en lugar de utilizar efectos en la postproducción. Así que ya sabes, Netflix tiene un lugar especial para esta joya de Steven Spielberg (y muchas más) en su inmenso catálogo de series y películas.