Tras el fracaso de las negociaciones con los grandes estudios, el sindicato de actores SAG-AFTRA se unió a la huelga de guionistas, un fenómeno que no ocurría desde hace 60 años, una situación que tiene preocupado al gremio y al público. Producciones como Deadpool 3 y Stranger Things detuvieron su rodaje por completo y es probable que ocurra lo mismo con titulos como Mufasa: The Lion King, Beetlejuice 2, Misión Imposible Sentencia Mortal parte 2 y Gladiador 2. Sin embargo, todo apunta a que la lista seguirá ampliándose.
La huelga, liderada por Fran Drescher, no solo afecta a los famosos más importantes de Hollywood sino también a actores secundarios que tienen prohibido grabar cualquier producción de cine y televisión, participar en viajes de prensa o estrenos de películas, así como promover de cualquier forma sus producciones en convenciones, siendo la Comic Con de San Diego una de las primeras afectadas. Aún así, los fanáticos han encontrado la manera de salvar el evento con otras actividades geek y con anuncios exclusivos de cintas que no tienen una fecha de estreno confirmada.
La última vez que ocurrió una huelga en Hollywood duró seis semanas continuas del 7 de marzo al 18 de abril de 1960, sin embargo algunos analistas consideran que en esta ocasión el panorama no es tan esperanzador, ya que es probable que aunque lleguen a una negociación con los estudios, no obtengan todos los beneficios que buscan. Mark Young, especialista en entretenimiento y profesor de la Escuela de Negocios, aseguró que la lucha es muy distinta a la de otras ocasiones.
No hay señales de que la huelga vaya a terminar pronto. A decir verdad, no creo que se resuelva en septiembre. No parece haber ningún movimiento en esa dirección
Dentro de las peticiones, los actores exigen la regulación de la inteligencia artificial (IA), aumentos en los salarios mínimos así como remuneraciones más altas cada vez que un servicio de streaming vende los derechos de una producción. "Ambos bandos reconocen que la industria ha cambiado gracias al streaming y prácticamente todos están discutiendo cómo van a dividir el dinero que se genera de las plataformas", comentó a EFE Robert Thompson, fundador del Centro Bleier para la Televisión.
Por otro lado, hay quienes esperan que ambos sindicatos logren negociar las regulaciones para garantizar la protección de actores como escritores. Sin embargo, aunque la huelga no se extienda tanto tiempo, se estima que el retraso de series y películas podría traer una pérdida de 4 mil millones de dólares, lo cual afectaría a la economía estadounidense. Así que es cuestión de tiempo para conocer las próximos anuncios.