Los problemas para Marvel con dos de sus personajes principales se complicada cada día más. Tenoch Huerta, el Namor que debutó en Black Panther: Wakanda por Siempre, ha sido acusado de supuesta manipulación, abuso y acoso por parte de varias mujeres en México, incluida la saxofonista de La Maldita Vecindad y los hijos del quinto patio, María Elena Ríos. Y justo un caso similar, pero por violencia doméstica, es el que vivió Jonathan Majors, mejor conocido en el universo de Kevin Feige como Kang el conquistador, el gran antagonista de la Saga del Multiverso, cuya estancia podría estar contada por tantos problemas que enfrenta desde hace una década.
De acuerdo con una investigación realizada por el portal Rolling Stone, la aclamada revista de música y entretenimiento, el también antagonista de Creed 3 tiene actitudes verdaderamente negativas según el testimonio de 40 personas que decidieron compartir sus experiencias junto al actor. Es decir, amigos, no sólo el caso de su novia ha sido un hecho aislado sino que sus conductas agresivas podrían datar desde hace más de una década, y hasta hoy muchas mujeres se han unido para exhibir todo este tipo de malos comportamientos que afectan los valores de la industria y de una empresa como Marvel, donde los niños, adolescentes y las familias son grandes consumidores de sus producciones.
Jonathan Majors tendría problemas por ejercer abuso físico y psicológico a niveles bastante extremos, de acuerdo con dos de sus exparejas, mientras que otra lo calificó como un hombre bastante autoritario, controlador y tirano. El actor, supuestamente, llegaba a instancias de otorgar permisos para hablar con ciertas personas, comer algunas cosas y si lo desobedecían, golpeaba paredes, arrojaba cosas y desataba su furia de forma errática con todo lo que tuviera al alcance, situación que habría escalado hasta tener contacto físico con algunas de las chicas que lo señalan.
La misma nota explica que esta naturaleza fue expuesta desde su incursión en la Escuela de Arte Dramático David Geffen de Yale, donde habría tenido varios altercados con compañeros y mujeres que preocuparon a la dirección. Aparentemente nadie tuvo el valor de acusarlo por el tremendo maltrato psicológico que ejerció sobre las víctimas, quienes describen de forma anónima que él hacía todo el trabajo para crear una codependencia tóxica cuya ruptura sólo afectaría de forma severa a la ellas, no a él. Es decir, utilizaba su poder e influencias para infundir miedo.
Poco después de que la actual pareja de Jonathan detonara su comportamiento violento, varios integrantes de producciones en las que él ha trabajado (Loki, Historia de Honor, Lovecraft Country, pero ninguna confirmada) lo acusaron anónimamente de ser un tipo realmente violento. Y será el próximo 3 de agosto cuando la corte determine si es culpable o no de todas las denuncias que, incluso, causaron su arresto tras el estreno de Ant-Man and The Wasp: Quantumania. Lo que es cierto es que ninguno de los compañeros de trabajo de Majors, en especial Paul Rudd, Michael B. Jordan, u otros han hecho comentarios al respecto. Sólo Anthony Mackie lo ha defendido y dado el beneficio de la duda.