Han pasado dos semanas desde que La Sirenita se integró a la cartelera y ha peleado la taquilla junto a Guardianes de la Galaxia vol. 3 y Rápidos y Furiosos 10. La nueva versión live-action de la clásica cinta de Disney fue recibida increíblemente por los fans del estudio que crecieron viendo a la princesa pelirroja cantar y perder la voz ante las manos de la malvada villana Úrsula (Melissa McCarthy) tras enamorarse del encantador príncipe Eric (Jonah Hauer-King).
Uno de los elementos que los espectadores más disfrutaron fue la voz de Halle Bailey y su interpretación de los clásicos de la cinta animada, pero algo que también señalaron como una de las partes más fuertes de la película fue la participación de la actriz Jessica Alexander, quien personificó a Vanessa, la versión humana de la malévola bruja del mar. Los fanáticos aseguraron que con apenas 10 minutos de aparecer en la pantalla, la intérprete logró robarse la película al brindar una actuación épica del personaje.
Como sabemos, la animación de Úrsula en La Sirenita está inspirada fuertemente por Divine, la protagonista de la cinta Pink Flamingos del cineasta John Waters, una de las películas más importantes del cine LGBTQ+; así que resultó satisfactorio que la modelo londinense, quien fue Vanessa en el live-action, también perteneciera a dicho grupo, de la cual se siente sumamente orgullosa.
Al crecer en Inglaterra, era más que obvio que la actriz también fuera parte del fandom de Harry Potter, pero aseguró que una de las películas la traumó de por vida. Millones de lectores y espectadores pasaron su infancia y adolescencia disfrutando de las novelas de J.K. Rowling o viendo las adaptaciones cinematográficas, que llegaron a su fin en 2011 con el estreno de Harry Potter: Reliquias de la muerte - Parte 2. Jessica compartió en entrevista para el canal de YouTube A Trip to the Movies with Alex Zane que su peor experiencia en el cine había sido con la cinta antecesora.
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“Cuando Dobby murió en Harry Potter y las reliquias de la muerte - Parte 1 tuve que salirme de la sala para ir al baño porque no podía dejar de llorar. Mi mamá tuvo que ir por mí para decirme que me relajara y me dijo ‘Tranquila, solo es una película’”. La intérprete incluso imitó la parte en donde el elfo dice ‘Dobby está feliz de estar con sus amigos’ antes de morir y la voz se le entrecortó un poco, lo cual quiso cubrir con una anécdota graciosa al recordar que los potterheads se dedicaron a dejar calcetines en la playa donde filmaron la última escena de dicho personaje y resultó en contaminación del mar.
Warner Bros. Pictures
La actriz de 23 años compartió que fue un momento muy impactante para ella y aún no puede olvidarlo: “Siempre recordaré lo mucho que lloré con esa cinta. Probablemente es de las primeras veces que lloré en el cine y no supe cómo controlar mis emociones en lo absoluto”. ¿Tú también sufriste con la muerte de Dobby? Te recordamos que La Sirenita continúa en salas de Cinépolis y Cinemex.
