En 1979 no había nacido. Aún me faltaba una década, incluso años después, para descubrir que el director Ridley Scott filmó ese año uno de los máximos clásicos del horror y ciencia ficción, Alien, el octavo pasajero, la odisea de la tripulación U.S.C.C. Nostronomo perdida en un planeta gaseoso donde se encuentran con los peligrosos Xenomorphos tratando de incubarse en sus cuerpos para reproducirse. Sólo la teniente Ellen Ripley (Sigourney Weaver) sabrá cómo sobrevivir a esta amenaza alienígena.
El próximo año este filme cumplirá 45 años, sin embargo, ¿sabían que un primer final pensando por el cineasta habría sido el fin de una franquicia? Así es queridos amigos, existe un final filmado y escrito por el propio director de Blade Runner y Gladiador que nos habría privado de ver Alien 2 (James Cameron), la horripilante Alien 3, Alien Resurrección y, quizá, aunque no formen parte del canon Alien vs. Depredador; y si nos ponemos puristas, Prometeo y Covenant.
Todo esto viene porque mañana habrá un maratón de Alien desde mediodía en Azteca 7 y como sabemos lo curiosos que son, decidimos contarles esta anécdota interesante. Si recuerdan, el final de la primera parte nos muestra a Ripley a punto de entrar en estado criogénico una vez más para volver a la tierra, cuando un violento Xenomorpho aparece y ella lo expulsa al espacio tras despresurizar la cabina y empujarlo con un proyectil. Pues, amigos, este realmente fue el final alternativo.
Resulta que el verdadero desenlace fue eliminado. Scott escribió la lucha entre Ripley y el Xenomorpho, pero éste ganaba al asesinarla atravesando su casco de astronauta y reventándole la cabeza. Instantes después la criatura caminaba al centro de mando para imitar la voz del capitán Dallas (Tom Skerritt) y decir, "me desconecto". ¿Qué significa? El Xenomorpho es una raza milenaria, avanzada e inteligente, lo suficiente para enviar obligar al ser humano a ir en busca del Nostronomo y reclamar nuevas víctimas.
Como la película costó 11 millones de dólares, una suma fuerte para los setentas, Scott se aventuró a contar el final durante una conferencia telefónica con los ejecutivos de Fox y estos no dijeron nada, pero "uno de ellos llegó a la locación 14 horas después, y amenazó con correrme de la película. Opté por no hacer ese final", narró para Entertainment Weekly, hacer aproximadamente seis años.
"Presentí que desde la llamada telefónica hubo tensión. Un largo silencio me lo advirtió. Fui un poco Alfred Hitchcock en ese momento, pero creo que finalmente fue mejor mantener a Sigourney como sobreviviente", agregó. Ahora es impensable imaginar que nos habríamos perdido de más cintas con el arte de H.R. Giger o quizá habrían realizado un reboot para dejar en el olvido a una de las películas de ciencia ficción más terroríficas de todos los tiempos.