¿Qué pasaría si un enorme mamífero ingiere una dosis de cocaína del tamaño de un oso? Oso intoxicado, la comedia de terror dirigida por Elizabeth Banks con las actuaciones de Alden Ehrenreich, Keri Russell, Ray Liotta y Brooklynn Prince, imagina los resultados: un caótico festival de sangre carnívoro sazonado con droga. La premisa suena extravagante, surrealista y divertida, pero hay una historia real detrás del oso, y no es cosa de risa.
La película se basa en un incidente de 1985 que involucró a un oso negro estadounidense de casi 90 kilos que fue encontrado muerto por una sobredosis en un bosque de Georgia. El extraño descubrimiento fue noticia de primera plana y le valió al oso apodos en broma como "oso de las nieves" (por el color blanco de la droga) y "Pablo Escobear" (el juego de palabras con el apellido del famoso traficante colombiano —que ha sido interpretado en cine por Benicio Del Toro y Javier Bardem—).
Pero la historia comenzó décadas antes y destaca los efectos de la imprudencia de los humanos cuando se trata de la vida silvestre que los rodea. ¿Cómo consiguió el oso su dosis de cocaína? Todo inicia con un hombre llamado Andrew Carter Thornton II. Nacido en 1944, era hijo de un destacado criador de caballos de Kentucky y se convirtió en un experto paracaidista del ejército estadounidense, e incluso ganó un Corazón Púrpura cuando E.U.A. invadió República Dominicana en 1965.
Thornton dejó el ejército ese mismo año y regresó a Kentucky, donde se unió al escuadrón de narcóticos del departamento de policía de Lexington. Pero Thornton pronto se interesó más en vender drogas que en tomar medidas enérgicas contra ellas. Como un excolega le dijo a la reportera de investigación Sally Denton años después, Thornton era "un hombre de personalidad del tipo paramilitar 007… un aventurero impulsado por la adrenalina que se aburría de ser policía". Eventualmente renunció y se convirtió en abogado.
El deseo de emoción de Thornton lo llevó cada vez más a su carrera paralela en el tráfico de narcóticos. En 1981, fue acusado junto con otras 24 personas de pilotar un avión que contrabandeaba marihuana de Sudamérica a Lexington, Kentucky; después de meses como fugitivo y una persecución masiva, cumplió cinco meses de prisión y fue inhabilitado.
Luego, en septiembre de 1985 (año en el que se estrenaron películas como Volver al futuro, Rambo 2 y Mad Max: Más allá de la cúpula del trueno), Thornton se elevó a los cielos para lo que sería su última misión de contrabando de drogas, saltando de un avión sobre Knoxville, Tennessee, con una bolsa de lona que contenía 15 millones de dólares en cocaína. Murió cuando su paracaídas falló.
Pero aunque la vida de Thornton había terminado, su legado no. Dos meses después de la muerte del contrabandista, un cazador de Georgia encontró un oso muerto rodeado por los restos de una bolsa de lona que los investigadores considerarían más tarde como la de Thornton. Un médico forense concluyó que el oso de 90 kilos había muerto por intoxicación aguda de cocaína después de ingerir entre tres y cuatro gramos de cocaína. “Es suficiente para matar a cualquiera”, dijo el investigador a los periodistas.
¿Realmente el animal se drogó con la cocaína? No está claro, y los científicos no están seguros de si algún animal experimenta el mismo tipo de euforia que los humanos experimentan con sustancias como el alcohol, la marihuana o la cocaína. Aunque los animales ingieren sustancias como hierba gatera, hongos alucinógenos y alcohol, no hay forma de saber si buscan las sustancias por sus efectos recreativos.
Pero las drogas tienen algunos efectos en los animales: por ejemplo, se ha visto a los renos actuando de manera errática después de consumir hongos, y se ha observado que todo tipo de vida silvestre se adormece después de un sorbo de alcohol. A veces, también, ingerirlos puede ser letal.
Cuando se encontró el verdadero "oso de la cocaína" en el bosque, llevaba muerto aproximadamente un mes. En contraste con los alborotos representados en la película de la también directora de Pitch Perfect 2 y Los ángeles de Charlie, los investigadores no informaron ningún comportamiento amenazante o destructivo antes de su muerte. Tampoco comerse la totalidad de la cocaína que se cree que Thornton había pasado de contrabando, y las autoridades concluyeron que un humano se había escapado con el resto.
A partir de este fin de semana puedes disfrutar Oso intoxicado en las salas de Cinépolis y Cinemex, cuyas carteleras ofrecen títulos tan diversos como el nuevo relato de superhéroes ¡Shazam! La furia de los dioses, el terror religioso de 13 exorcismos o el drama con perspectiva histórica Brujería.