El próximo domingo se termina The Last of Us por HBO Max y nos dejará al borde de la tristeza como lo hizo con House of the Dragon, y aunque nos dejará con Amor y muerte, de Elizabeth Olsen, no será lo mismo. Como todo desenlace, los fans han empezado a teorizar muchas cosas, en especial los que no han jugado el videojuego creado por Neil Druckmann, pues están haciendo cualquier tipo de ritual para no ver morir al personaje de Pedro Pascal.
El episodio ocho nos dejó al borde del asiento luego de que Ellie (Bella Ramsey) apuñaló hasta la muerte a David (Scott Shepperd) y se reencontró de inmediato con su mejor amigo, fundiéndose en un tierno abrazo que nos dejó al borde de la lágrima. Conociendo a HBO, alguna muerte importante tendremos que ver durante el próximo domingo, por eso tememos por la vida de nuestro querido Big Daddy, así que ya empezaron a soltar todo tipo de mercancía para pedir por su salud.
Por ejemplo, una de las principales atracciones en la Seattle Comic Con fue el puesto que se dedicó a vender todo tipo de mercancía conmemorativa al también protagonista de The Mandalorian. Podemos ver tote bags con su hermoso rostro guiñando un ojo y deseándonos la mejor de las suertes. Uf, Pedrito realmente es único. El santito con su rostro para pedirle a diosito que nos lo tenga bien cuidado tampoco falta para todos los adeptos a compartir su palabra.
Pero lo que más nos sorprendió, y que seguramente pronto las veremos en Tepito, La Merced o cualquier tianguis de nuestro bello México, la veladora de San Pedro Pascal y Santa Bella Ramsey. Que quien sea que esté arriba nos los cuide de cara al final de temporada, el cual fue adelantado una hora para no competir directamente con los premios Oscar, sobre todo después de la polémica entre Michelle Yeoh y Cate Blanchett, un morbo que ya generó muchas expectativas en el público.
Como sea, no vendría mal prender una de esas veladoras, aventarse un "Padre Nuestro" y pedirle a quien sea que nos los protejan de todo mal, Cordyceps, las luciérnagas, caníbales e infectados durante su última incursión en The Last Of Us, la adaptación de Craig Mazin que nos enseñó que se puede hacer una buena adaptación de videojuegos sin necesidad de hacer cochinadas como Resident Evil por ejemplo.