Scott Lang (Paul Rudd) y Hope Van Dyne (Evangeline Lilly) son los primeros Vengadores en enfrentar a Kang el conquistador (Jonathan Majors) y M.O.D.O.K. (Corey Stoll) en el reino cuántico donde transcurre el inicio de la Fase 5 de la saga del multiverso, Ant-Man and Wasp Quantumania, cuyo preestreno ya es hoy en Cinépolis y Cinemex, pero ¿realmente es tan asquerosa como lo dice la crítica?
Les contamos sin spoilers qué pueden esperar de este filme del cineasta Peyton Reed, cuyo estreno tiene todo en contra al ser la segunda película del MCU que recibe críticas tan negativas. De entrada, amigos, se encontrarán con un espacio cuántico completamente inspirado en la imaginación de George Lucas, un ecosistema parecido a Tatooine y el desarrollo de Star Wars Episodio 4, una nueva esperanza.
Podemos relacionar muchas criaturas, vehículos, vestuarios y hasta armas similares a la saga galáctica más popular de todas, y si nos ponemos más quisquillosos, hay blasters que parecen tomados del Covenant en Halo. Con esto les queremos decir que no parece una película de Marvel en absoluto, sino una especie de fan fiction basada en la casa editorial que Stan Lee fundó fusionada con títulos emblemáticos de la cultura pop.
Dicho esto, no importa si no te acuerdas de Ant-Man and the Wasp, Black Panther: Wakanda por siempre u otros proyectos en específico, basta con que sepas que estamos en post Avengers: Endgame y hagas memoria del villano en la primera cinta del Hombre hormiga. Listo, disfrútala acción, porque si algo positivo tiene el filme es el frenesí en el que transcurren las acciones en el reino cuántico. Todo el tiempo pasa algo emocionante.
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Sin embargo, sí le sobran aproximadamente 20 minutos. Reed cayó en la introducción desinteresada de Cassie Lang (Kathryn Newton). Contrario a otros virtuales integrantes de los Young Avengers, su expectativa es nula. Verla no provoca nada de emoción como sí vibramos cuando vimos a Kate Bishop (Hailee Steinfeld) tomar el arco de su mentor, Hawkeye (Jeremy Renner). Es tan secundaria su presencia que, precisamente, entorpece el desarrollo.
Jamás conectas con ella. Realmente es un cero a la izquierda, de la misma forma que el personaje de Bill Murray, Krylar, el gobernador de Axia, un espacio en el reino cuántico. Hank Pym (Michael Douglas) y Janet Van Dyne (Michelle Pfeiffer) lo hacen excepcional, cada uno tiene una participación en particular que te revienta la cabeza, en especial a los amantes de las historietas.
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Tiene toques de comedia precisos, no forzados como sucedió con Luis (Michael Peña), el amigo de Scott, son simples y al grano; cosa que agradecemos después de sufrir un tormento en Thor: Amor y trueno de Taika Waititi. A nivel actuación, Majors se queda con la presea. Desafortunadamente la fuerza de su antagonismo queda a deber por el libreto. Si desconoces el universo Kang, perderte es tu destino. Se presenta como un terror del espacio y tiempo, pero su desenlace deja mucha incertidumbre en el público normal.
A comparación de la saga del infinito, donde Thanos (Josh Brolin) emergió gradualmente hasta mostrar su verdadero poder, Kevin Feige no ha jugado bien sus cartas esta ocasión precipitando la presencia del nuevo antagonista. Las dos escenas postcréditos tienen mucho sentido para el porvenir, pero sigue atrasando mucho el debut de Los cuatro fantásticos, cuando ya es un grito desesperado por tanto guiño dejado. Esta película era un must.
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Ant-Man and the Wasp: Quantumania es una cinta bastante atropellada por la ambición de su director y presidente del MCU, pero distamos mucho de los comentarios gringos que están destrozando la obra con la que Marvel abre el 2023. Lo que es un hecho es la necesidad de ya poner en orden el manejo del multiverso para propósitos de arribar a Avengers: Secret Wars con todo bien explicado, de lo contrario la presencia del Beyonder y la estratosférica guerra será un caos.
