Cuando hablamos en cine de terror mexicano de inmediato pensamos en títulos como La invención de Cronos de Guillermo del Toro, Hasta el viento tiene miedo de Carlos Enrique Taboada o Santa Sangre de Alejandro Jodorowsky, cintas realizadas antes de que iniciará el nuevo siglo. Desde entonces han sido contadas las historias que realmente han producido horror en la audiencia, ejemplo de ello es Vuelven de Issa López o Somos lo que hay de Jorge Michel Grau, siendo Mal de ojo la gran sorpresa del año que nos confirma que hay grandes exponentes del género en el país.
Isaac Ezban presenta Mal de ojo, un largometraje en el que Nala (Paola Miguel), una niña de 13 años que es obligada a viajar al pueblo de su abuela (Ofelia Medina) con el objetivo de encontrar una cura de la extraña enfermedad de su hermana, Luna (Ivanna Sofia Ferro). Su estancia en la casa se convertirá en una caótica pesadilla, en donde las pequeñas se enfrentarán a misteriosos sucesos hasta descubrir los terribles planes de Josefa.
Una historia digna de contar
A pesar de que otros cineastas han explorado la hechicería y la cacería de brujas, muy pocos han llevado el ocultismo a su máximo esplendor, logrando crear una atmósfera de terror e incomprensión, así lo vimos con The Witch de Robert Eggers, Suspiria de Luca Guadagnino o Hereditary de Ari Aster. Ezban fue atraído por una peculiar historia de República Dominica y presentó por primera vez al Bakah, una criatura vil que desencadena los males en una familia y se expande silenciosamente hasta afectar a la comunidad.
La historia cuenta con un guion sólido que juega con la mente del espectador y que recupera las características más sombrías de las brujas, mujeres condenadas a causar terror por su gran poder. Asimismo hay que destacar el maquillaje y la construcción de las temibles criaturas, un trabajo impresionante a cargo de Roberto Ortiz (El infierno), quien logró dar vida a estos atemorizante seres provenientes de la imaginación de Ezban por mera creatividad en colaboración con el cineasta e influencia en la filmografía de Guillermo del Toro, el mexicano que ha destacado este año por su película animada Pinocho.
La República
El director de Los Parecidos rompe con las narrativas tradicionales de seres sobrenaturales, casas embrujadas o exorcismos que se habían perpetuado en las producciones contemporáneas de terror y retoma un subgénero que ha estado ausente en el país en los últimos años: la brujería. Y lo mencionamos por que después de sus precursoras, Veneno para las hadas de Taboada y La tía Alejandra de Arturo Ripstein, muy pocos largometrajes han logrado alcanzar ese nivel de misticismo y horror inspirado en el folclor latinoamericano.
Este es un buen momento para mencionar Huesera, la ópera prima de Michelle Garza Cervera en la que a través de escalofriantes apariciones y aquelarres sororos, reflexiona sobre la maternidad, rompiendo algunos tabús de la familia. Pese a que la cinta fue alabada por la crítica y ha sido presentada en otros festivales, su estreno está programado hasta el 23 de febrero de 2023. A diferencia de la obra de Ezban, con más de cinco semanas en cartelera, superando el tiempo de exhibición de otras producciones comerciales de corte nacional.
Según las cifras de la Cámara Nacional de la Industria Cinematográfica (Canacine), Mal de ojo fue la tercera película más taquillera de 2022 en el país y la primera del género de terror. A ella le siguen El exorcismo de Dios, La exorcista y Karem la posesión, tres películas sobre posesiones demoníacas. Por supuesto la historia destaca sobre toda las demás, ya que presenta algo diferente en donde explora magistralmente uno de los temores colectivos más legendarios.
Punto Mx
'Mal de ojo', brujería que trasciende
Mal de ojo no solo presentó una historia de brujas en un contexto actual que juega constantemente con el pasado, sino que también es una cinta que ha trascendido fuera de la pantalla. Contó con una exhibición especial en Six Flags, el parque de diversiones de la Ciudad de México. La atracción consistía en una casita del terror en donde podrías encontrar artículos exclusivo del rodaje mientras eras perseguido por la temible bruja.
Actualmente la película ha sido traducida a otros idiomas, estrenándose en países como Vietnam y Rusia, además de varias regiones en Latinoamérica. La buena aceptación ha hecho que se retrase su estreno en streaming, un efecto similar que ocurrió con Teléfono Negro, ya que debido al gran éxito en taquilla no ha sido trasladada a ninguna plataforma.
24 horas
Debido a que el largometraje fue rodado en México, permite reconocer algunos lugares de la capital citadina, creando la sensación de que en cualquier sitio de nuestra cotidianidad podría estar resguardado un bakah. Un pensamiento que seguramente te dejó intranquilo después de salir del cine, logrando que la historia permanezca en tu memoria y por qué no, en tus mas siniestras pesadillas.
Con esto Isaac Ezban se posiciona como uno de los cineastas más relevantes del género, quien ha demostrado que existe un interés por innovar las narrativas. El propio Guillermo del Toro advirtió que hacen falta más historias lejos de Omar Chaparro o Eugenio Derbez si queremos que el cine nacional siga creciendo y el director de El Incidente es una gran ejemplo de ello. Y si eres fanático del horror también podrías darle una oportunidad a Sanctorum de Joshua Gil y El hoyo en la cerca de Joaquin del Paso, dos propuestas que quedaron en el olvido este año.
