El controversial director italiano Ruggero Deodato, director de Holocausto caníbal, el falso documental más crudo en la historia del celuloide, falleció hoy a los 83 años, de acuerdo con información difundida por su amigo Sergio Martino. Su obra ha sido de mucha influencia para cineastas como Eli Roth, quien tuvo la osadía de invitarlo a hacer una actuación especial en Hostal 2 y la leyenda aceptó.
"Me acabo de enterar que Ruggero Deodato nos ha dejado. Con él compartí una maravillosa temporada de cine. Básicamente comenzamos juntos un camino paralelo que en estos años de reevaluación de nuestro cine, nos ha llevado goliardicamente alrededor del mundo. Hasta pronto, Ruggero", fue el conmovedor mensaje dejado para el cineasta que influyó en la obra de Wes Craven, director de Scream, Quentin Tarantino y Oliver Stone.
Hasta ahora se desconoce la causa del fallecimiento, pues su hijo Saverio Deodato-Dionisio, producto de la relación que tuvo con la actriz Silvia Dionisio no ha hecho pública ninguna postura respecto al deceso. El maestro Deodato nació en Potenza, Italia, el 7 de mayo de 1939, encontrando en el thriller ultra violento Live Like a Cop, Die Like a Man el sello que más tarde fijaría al utilizar 100 mil dólares para crear el falso documental Holocausto caníbal, su obra maestra.
El filme narra cómo un grupo de cineastas, liderados por el profesor Harold Monroe (Robert Kerman), se adentran a la selva amazónica para documental los usos y costumbres de las tribus caníbales Yanomamo y Shamatari quienes se ven amenazados por la presencia de los occidentales y se ven obligados, por su instinto y lejanía con la civilización moderna, a destazarlos para proteger su tierra y comunidad.
Mató animales reales para fines artísticos
A lo largo del pietaje, Ruggero utilizó el gore para representar el ambiente primitivo que llevaba a utilizar piedra para cortar la carne y castigar a los invasores por medio del empalamiento, además de mostrar explícitamente la caza de animales para obtener alimentos. De hecho, Deodato utilizó animales de verdad para asesinarlos, acción por la que pidió perdón empezando los años 2000 y sabiendo que Green Inferno, de Roth, sería un remake de su obra.
Fui un estúpido al matar animales reales
El director mató seis animales, los mostrados en pantalla, y siete más que no quedaron registrados: coatis, tortugas, tarántulas, monos, serpientes y cerdos asesinados con machetes, pistolas y cuchillos. Al ser un filme bastante real, con excepción de las aniquilaciones humanas, Deodato compareció ante un tribunal, siendo los actores sus principales testigos. Se creía que había sacrificado seres humanos por satisfacer el morbo de su historia. Ese logro no lo obtuviero ni los creadores de Dahmer o Luca Guadagnino con Hasta los huesos.
Salió limpio para su fortuna. Ruggero dirigió por última vez en la antología Deathcember, donde también colabora el director de Mal de ojo, Isaac Ezban, y escribió la historia para el videojuego Borneo: A Jungle Nightmare, cuya fecha de lanzamiento de acuerdo con su página oficial sería en 2024, siendo una de las obras póstumas del padre del falso documental. El terror ha perdido a uno de sus grandes emblemas. Nos vemos en el infierno, maestro Deodato.