Avatar: El camino del agua de James Cameron ya se estrenó en todas las salas de Cinépolis y Cinemex de México. En la nueva entrega de Avatar, James Cameron quiso inspirar a los fanáticos y dar un mensaje acerca de la importancia de la conservación del medio ambiente y los océanos. Sin embargo, el director de Titanic ha sido señalado de maltrato animal al usar delfines para promocionar su más reciente película.
El también director de Terminator hizo enfurecer a los activistas de la defensa por los derechos de los animales al asistir a un espectáculo de delfines en Japón como parte de la promoción de Avatar: El camino del agua. Cameron fue acusado de respaldar la crueldad que ocurre en los parques de diversiones marinos como Seaworld, expuesta en el documental de Blackfish.
Al evento en Tokyo acudieron los actores Jon Landau, Zoe Saldana, Sam Worthington, Sigourney Weaver y Stephen Lang, quienes también presenciaron en el parque acuático las actuaciones de los mamíferos marinos. Además, el propio Cameron fue quien presentó el espectáculo de cetáceos, diciendo "Bienvenidos a Pandora", refiriéndose al mundo ficticio de sus cintas.
Al finalizar el show que contó con más de seis delfines saltando, el director de Mentiras arriesgadas bromeó diciendo que "pidieron permiso a los animales" y luego expresó su admiración por los mamíferos acuáticos debido a su inteligencia y sociabilidad. Mientras tanto, numerosas organizaciones de derechos de los animales criticaron severamente a Cameron por asistir a un espectáculo que promueve el maltrato animal.
Ambientada más de una década después, Avatar: El camino del agua ve a los actores Sam Worthington y Zoe Saldana regresar como Jake Sully y Neytiri, ahora padres de cinco hijos. La cinta que supuestamente es una "carta de amor al océano" contradice al mismo director al incluir un espectáculo de delfines en cautiverio con fines promocionales, calificado como un acto de incoherencia.