Uno de los estrenos que esta semana llega a la cartelera de Cinemex y Cinépolis es Cría siniestra, dirigida por Hanna Bergholm. La película finlandesa se centra en Tinja (Siiri Solalinna), una muy joven gimnasta desesperada por ganarse la aprobación de su exigente madre (Sophia Heikkilä). Cuando Tinja comienza a quebrarse debido a la presión de las expectativas de su madre y las confusiones de la pubertad, algo inesperado comienza a gestarse y crecer en un huevo que encuentra abandonado en el bosque.
En su primer largometraje, Bergholm recupera algunas de sus influencias y referentes, tanto estilísticos como temáticos, incluyendo Voraz (de Julia Ducournau), The Babadook (de Jennifer Kent) y Los otros (de Alejandro Amenábar), para explorar diversos temas vinculados a la represión, la vergüenza y la aceptación del cuerpo, así como las complejas relaciones familiares, específicamente la de madre-hija.
Mezcla oscura de terror y cuento de hadas
Nordisk Film
La directora Hanna Bergholm mezcla hábilmente el concepto del monstruo clásico (aquel que debe permanecer oculto) con la atmósfera brillante y mágica del cuento de hadas en una pesadilla suburbana. Cría siniestra existe en un mundo de imágenes contrastantes; las escenas diurnas en planos de colores brillantes y perfectamente enmarcados sólo son una fachada para ocultar un mundo más oscuro.
El cuervo y su simbolismo
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En la escena de apertura, un cuervo irrumpe violentamente en la lujosa casa de la familia protagonista. El ave destruye todo lo que encuentra generando incomodidad. Y aquí resulta pertinente recordar que los cuervos, en las mitologías eslava y nórdica, son animales espirituales, asociados con la brujería y la magia ritual. Son tanto un signo de transformación y audacia, como heraldos de la muerte, la desgracia y la maldad.
El inquietante monstruo
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Además de ofrecer un recordatorio de que el CGI no es la única forma de dar vida a los monstruos, la criatura en evolución (obra del diseñador animatrónico Gustav Hoegen) es enigmática y espeluznante al grado de acompañar a otras inquietantes criaturas del cine contemporáneo, incluyendo El ritual y El huésped. Una de las mejores escenas de la película involucra a la criatura saliendo de la cama de Tinja para quedar enmarcada casi por completo en un espejo.
La maternidad desde la complejidad
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La película también se concentra en la relación madre-hija desde una perspectiva inusual. Es Tinja, la niña, quien intenta enmendar los errores cometidos por su madre cuando asume la responsabilidad de cuidar a la extraña criatura que encuentra en el bosque. Se sabe que las aves son muy protectoras con sus crías, y eso es precisamente lo contrario de lo que representa la madre de Tinja.
Todavía hay ideas originales en el género de terror
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En un mundo de secuelas, precuelas y remakes, Cría siniestra se siente como un soplo de aire fresco junto con otras películas como Sonríe y Bárbaro. La directora demuestra una notable confianza al trabajar desde las estrategias del horror corporal y del drama familiar al abordar la complicada relación entre madre e hija y la difícil transición a la adolescencia, al mismo tiempo que ofrece un comentario sobre nuestra obsesión cultural por la imagen, la fama y la perfección.
