Antes de 'The Last of Us', Craig Mazin estuvo detrás de una miniserie que sumergió a los espectadores en el corazón de la catástrofe nuclear más impactante de la historia de la humanidad.
En 2023, The Last of Us, la serie basada en el popular juego de video, logró que el fenómeno zombie se volviera popular una vez más. La serie insignia de Max se convirtió en todo un éxito al mostrar cómo sería un mundo en el que el hongo Cordyceps (que sí existe) ha infectado a la mayoría de la población y los ha convertido en monstruos. Tras una primera temporada con millones de reproducciones, una segunda entrega llegará en los próximos meses, trayendo de vuelta a Pedro Pascal y Bella Ramsay a este universo post-apocalíptico.
El responsable de adaptar The Last of Us y conseguir que el espíritu de la fuente original se mantuviera intacto fue Craig Mazin, quien afortunadamente estará de regreso en la segunda temporada de la aclamada serie de Max. Lo cierto es que la serie de zombies no es la única producción del guionista y director estadounidense que ha causado conmoción; en 2019, Mazin estuvo a cargo de un programa de Max que dejó huella imborrable entre el público con tan sólo cinco episodios. "Inquietante e impactante", son sólo algunas de las palabras que se han usado para describir a esta serie con una calificación casi perfecta.
Antes de The Last of Us, Mazin estuvo detrás de Chernobyl, una miniserie que sumergió a los espectadores en el corazón de la catástrofe nuclear de 1986 ocurrida en dicha ciudad rusa. Cualquiera que haya visto la serie se le helará la sangre al ver imágenes de una historia que sí ocurrió. Para muchos, Chernobyl es un testimonio aterrador que describe a la perfección el funcionamiento del sistema soviético, repasando con detalle el peor accidente nuclear en la historia de la humanidad.
Cautivante de principio a fin, Chernobyl regresa a los hechos ocurridos antes, durante y después del accidente nuclear de 1986 que afectó a la central eléctrica VI Lenin en Ucrania, a pocos kilómetros de la localidad de Prypiat. Durante sus cinco episodios, la serie destaca la suerte de los empleados de la planta, los habitantes de Prypiat, pero también la gestión de la crisis por parte del gobierno soviético y el impacto de la catástrofe en el resto del mundo.
En 2019, cuando se emitió, la respuesta tanto entre el público como la crítica fue unánime, dando a Chernobyl una puntuación casi perfecta en sitios como Rotten Tomatoes, con un 95 por ciento. El programa es elogiado por su realismo, su puesta en escena, pero también por su deseo de contar la historia de las personas directamente afectadas en ese momento. En definitiva, Chernobyl es una serie que reafirma que los seres humanos pueden no están a la altura y que a veces tecnología está más allá de ellos.