La tercera entrega de ‘Terrifier’ ha sorprendido en taquilla y en críticas, logrando una posición envidiable. Con su éxito arrollador y controversias, Art the Clown busca redefinir los límites y trascender en el cine de terror.
La franquicia Terrifier dio un emocionante paso adelante con Terrifier 3, y en el proceso se ha consolidado como un reemplazo espiritual para dos de las franquicias más icónicas en la historia del cine de terror. Terrifier 3, que se encuentra en la cartelera de Cinépolis y Cinemex, ha superado múltiples récords de taquilla, y una secuela está en desarrollo para continuar con una narrativa que ha capturado tanto a los fanáticos incondicionales como al público en general.
Uno de los elementos que diferencia a Terrifier de otras franquicias de terror es su modesto presupuesto y la ausencia de una gran estrategia de marketing, lo cual hace su ascenso meteórico aún más sorprendente. Que Terrifier 3 haya multiplicado por 14 su presupuesto en la primera semana lo coloca en una posición privilegiada en el género de terror. Esta rentabilidad se debe, en gran parte, a un factor específico que lo posiciona como el reemplazo moderno de dos de las películas de terror más influyentes de los últimos 70 años.
La polémica saga de ‘Terrifier’ y su ascenso: ¿Es el nuevo referente del cine de horror?
La primera entrega no tuvo un gran impacto en la industria al momento de su estreno. Fue una producción independiente de muy bajo presupuesto, y aunque desarrolló una pequeña base de seguidores, no fue adoptada por un público más amplio. Sin embargo, Terrifier 2 logró volverse viral cuando se difundieron reportes de espectadores que se desmayaban en las proyecciones debido al gore y la violencia extrema. El mismo fenómeno se repitió con las proyecciones iniciales de Terrifier 3, lo que disparó su taquilla y consolidó su popularidad.
El boca a boca viral y el inicio polémico de la popularidad de esta franquicia reflejan directamente los primeros días de dos de las películas de terror más grandes de la historia: Psicosis, de Alfred Hitchcock, y El exorcista, de William Friedkin. Ambas cintas desataron su propia controversia en su época; Psicosis rompió varios tabúes sobre sexualidad y violencia que en su momento se consideraron depravados, mientras que El exorcista fue tan aterradora y sacrílega que se reportaron desmayos y huidas de la sala por parte del público.
Estos elementos ayudaron a que ambas películas alcanzaran gran popularidad, ya que el público siempre ha sentido fascinación por lo polémico y por aquello que rompe los límites de lo permitido. En este sentido, Terrifier 2 y Terrifier 3 son los equivalentes modernos de esas películas. Aunque hoy en día se necesita mucho más para impactar a una audiencia de terror, la violencia sádica y la depravación del personaje Art the Clown (David Howard Thornton) logran generar el mismo impacto que Norman Bates (Anthony Perkins) y Regan MacNeil (Linda Blair) causaron en su época.
Tanto Psicosis como El exorcista generaron secuelas, siendo la más reciente de esta última El exorcista: Creyentes, que se estrenó el año pasado. Sin embargo, ninguna de estas franquicias produjo secuelas que se acercaran al impacto y la aclamación de las originales. Mientras que las películas iniciales de ambas franquicias son consideradas obras maestras del cine de terror, muchos fanáticos apenas conocen la existencia de sus secuelas oficiales.
Aquí es donde Terrifier tiene la oportunidad de superar a ambas franquicias. Mientras que la primera entrega fue bien recibida solo por una pequeña audiencia, sus secuelas se han convertido en fenómenos internacionales. A diferencia de los filmes de Hitchcock y Friedkin, Terrifier parece mejorar con cada entrega, con una historia cohesionada y personajes recurrentes que el público ha llegado a apreciar. Aunque es muy temprano para asegurar que la saga de Damien Leone tenga el legado duradero de los clásicos del terror, está abriéndose paso a machetazos para trascender.