Como si de un abrazo al corazón se tratara, esta cinta mexicana conmueve hasta las lágrimas con su entrañable relato.
"Perdí a mi padre cuando tenía 9 años y recuerdo haberme sentido muy sola en ese camino". Eso fue lo que comentó la directora Ángeles Cruz cuando, en entrevista exclusiva para SensaCine México, la cuestionamos sobre cómo logró retratar de manera tan exacta, en su película, el duelo infantil. "[Todo surgió] a partir de la experiencia propia", agregó.
Valentina o la serenidad ha llegado a las salas de cine de México, después de un muy exitoso paso por diversas muestras internacionales. Habiendo tenido su estreno en el Festival de Cine de Toronto, la cinta también pasó por el Festival de Cine de Morelia, además de haber conseguido el Colón de Oro por Mejor película en el Festival de Cine Iberoamericano de Huelva.
Asimismo, la película obtuvo tres nominaciones en la 66ª entrega del Ariel, en las categorías de Mejor guion original, Mejor coactuación femenina y Mejor revelación actoral. A través de un emotivo relato, el filme nos cuenta la historia de Valentina, una niña que ha perdido a su padre en un accidente. Ante la incomprensión sobre lo que ocurrió y en negación a no volver a verlo, la pequeña emprenderá un viaje personal en donde su imaginación será la única guía para descubrir qué hay detrás de esa inesperada y dolorosa pérdida.
"Quise construir una película que hablara sobre el duelo y sobre este largo proceso que es atravesar la ausencia y acomodar esta pérdida donde menos duela. También quería recuperar esa mirada de niña; quería hablarle a los niños y decirles que es natural sentirse así, del mismo modo que quería explorar el asombro de empezar a vivir. Esto, combinado con el proceso de duelo, puede ayudar a tratar de lograr algo de serenidad", expresa la realizadora, Ángeles Cruz.
Por su parte, Myriam Bravo, quien da vida a la mamá de Valentina (Danae Ahuja Aparicio), es un personaje que también está atravesando un doloroso (y silencioso) duelo por la partida de su esposo, sin embargo, debe mostrarse fuerte ante sus hijos para ser el nuevo soporte de la familia. ¿Qué tan desafiante fue haberse puesto en los zapatos de una mujer así?
De acuerdo con Myriam, algo que le fue de mucha utilidad fue ver a los demás personajes en sus respectivos duelos, para así analizar en dónde se podía sentir reflejada. "Fue un viaje muy hermoso haber podido trabajar esta contención y estos silencios, acompañada de Ángeles en todo el proceso de investigación y conociendo la cultura mixteca", compartió la actriz.
Valentina o la serenidad es una película con un sinfín de lecciones, no obstante, tal vez la más importante de todas sea la de aprender a vivir en el presente y disfrutar todo lo que tenemos a nuestro alrededor. Haciendo alusión a ello, la directora Ángeles Cruz reveló que en estos momentos, tras el estreno del filme, se siente como el personaje de Valentina: "tratando de alcanzar la serenidad y sin perder el gozo por la vida"